aragón
Alberto Quílez: "Me he llevado el aula de Primaria a la Universidad"
Doctor en Educación. Candidato a Mejor Docente de España en la categoría de Universidad.
El aragonés Alberto Quílez Robres se encuentra censado entre los 10 finalistas al premio de Mejor Docente de España en la categoría de Universidad. ¿Le digo felicidades o esperamos al fallo del comité evaluador?
El hecho de estar nominado ya supone una gran felicidad. Además, me han nominado mis alumnos, lo que constituye un hecho muy especial. Ahora será un comité de expertos el que decida valorando los currículos de los candidatos.
Su currículo pesa lo suyo…
Nunca me gustó la titulitis. Me gustan más las experiencias, la formación verdadera. Ahora soy profesor de la Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación. Estoy en el Grado de Primaria con una asignatura que se llama Maestro y Relación Educativa.
Qué nombre tan bonito para una asignatura…
Así es. La sociedad debería respetar al educador. Por nuestras manos pasa el futuro. Los valores que hacen digna una sociedad se aprecian en gran medida desde la educación. El docente, sin ninguna duda, es una pieza clave.
Cuando hablaba de su currículo, también me refería al Premio a la Excelencia Educativa recibido en 2021.
Fue por la atención a alumnado superdotado y de altas capacidades (por encima de 130 de cociente intelectual). Fue un proyecto real llevado a cabo en un ambiente escolar en Primaria y Secundaria. Maravilloso.
En mi curso, en EGB, había un niño con un cociente 136. Era muy especial…
Sí. Pero tienden a camuflarse. Se saben diferentes, pero habitualmente intentan pertenecer a lo socialmente aceptado, a la llamada normalidad, al rebaño.
Ese niño nunca quiso pertenecer al rebaño. Le aseguro que siempre quiso ser él mismo.
Ahí empieza el problema, por una falta de comprensión social. Hay que tener mucha madurez para saberte adaptar y encajar en la sociedad.
Estuve con él no hace mucho tiempo. Me alegré un montón: lo vi bien, feliz y desarrollado.
Esa es la clave, el desarrollo del potencial. Y ahí debemos estar nosotros para apoyarle.
Hablan y no paran de su metodología educativa, de su forma de dar clase.
Además de ser profesor, trato de reforzar el vínculo socio afectivo y aplicar métodos de enseñanza y aprendizaje muy diversos. Me he traído el aula de Primaria en que trabajaba a la universidad.
¡Qué chulo!
Ahí está la ‘gamificación’, que es ludificar, aprender jugando, crear juegos para aprender. O píldoras formativas, con todo el temario de la asignatura explicado en vídeos. También, el pensamiento de diseño y la creación de mapas conceptuales temáticos.
¿Es concebible una sociedad sin educación?
Imposible. Una sociedad sin educación no es sociedad. Dicen que lo que nos distingue de los animales es el lenguaje y la racionalidad; sin embargo, en verdad, lo que nos diferencia es la educación. Criar a alguien también lo puede hacer un animal. Incluso crear estructuras sociales.
¿La manada, por ejemplo?
Exacto. Pero hablar de educación de manera holística, eso solo lo puede entender y disfrutar el ser humano. La educación, además del saber conceptual, nos enseña que existen saberes como el saber hacer, saber ser y saber estar.
Por cierto, me ha hablado muy bien de usted la catedrática Alejandra Cortés.
Fue mi directora de tesis. También mi maestra y el espejo donde mirarme.
Bonito espejo…
Desde luego.
Qué bien explica el concepto motivación Alejandra Cortés…
Es esencial la motivación en todas las etapas de la formación. Pero solo en la madurez vamos a darnos cuenta de que la vida sin motivos no plantea objetivos. Así de claro.
