La rebaja del IRPF será de medio punto y supondrá un ahorro de entre 42 y 342 euros
Los contribuyentes que declaran hasta 90.000 euros pagarán entre un 0,25% y un 5% menos en el tramo autonómico. La subida a las rentas más altas irá de 108 a 2.508 euros, lo que ampliará la brecha que ya existe con el tipo estatal.
La rebaja del tramo autonómico del IRPF será de medio punto y supondrá un ahorro de entre 42 y 342 euros para los que declaran hasta 90.000 euros, lo que implicará beneficiar a 720.000 contribuyentes aragoneses, el 99% del total. Por el contrario, las rentas más altas deberán afrontar una subida de hasta un punto y medio y pasarán a pagar entre 108 y 2.508 euros más, que afectará únicamente a los 6.000 ciudadanos restantes que pagan anualmente el Impuesto de Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Así se puede resumir el ajuste fiscal que cerraron el pasado miércoles los cuatros socios del Gobierno de Aragón, PSOE, Podemos, CHA y PAR, y cuya aprobación saldrá adelante con el proyecto de ley de Presupuestos de 2023 que, si no hay cambios, irá a un Consejo de Gobierno extraordinario el próximo viernes. El día previo, las Cortes de Aragón debatirán el techo de gasto, que supondrá un hito al alcanzar los 6.902 millones.
La propuesta fiscal, a la que ha tenido acceso HERALDO, establece una reducción de medio punto en el tipo del IRPF que el Ejecutivo autonómico aplica a las clases bajas y medias, que afectará a los cinco tramos del impuesto existentes hasta 50.000 euros. Y estos oscilarán entre un 9,5% y un 20,5%.
A partir de esa cuantía, el tramo autonómico tendrá tipos más altos. A los que declaran 60.000 euros se les aplicará un punto más del vigente y asumirán un 23% y los de 80.000 y 90.000 euros, otro punto y medio adicional para llegar al 24% y al 25%, respectivamente. A los que ingresan 130.000 euros se limitará a un punto y a los que pasan de 150.000 y 300.000 se reducirá a medio. En estos tres tramos, el tipo se fijará en un 25,5%.
Los ciudadanos tributan por tramos hasta llegar a la cantidad declarada, por lo que todos se beneficiarán de la bajada diseñada por la Dirección General de Tributos para las rentas bajas y medias. De hecho, se ahorrarán dinero todos los que declaren hasta 90.000 euros.
En el avance dado a conocer el pasado viernes en el debate sobre el estado de la Comunidad, el presidente, Javier Lambán, se limitó a señalar el ajuste en el impuesto, sin concretar los tipos y su impacto sobre los ciudadanos, y manifestó que su aplicación será gradual y descendente cuanto más se cobra.
Además, apuntó que la reforma fiscal amplía igualmente algunas bonificaciones y exenciones en el impuesto de Sucesiones y Donaciones y compensa parcialmente el impacto sobre las arcas públicas con la subida no solo del IRPF para las rentas más altas, sino de las figuras impositivas que gravan a las grandes superficies comerciales, a las empresas hidroeléctricas y al transporte eléctrico de alta tensión.
Hasta un 5% de rebaja
En concreto, las rentas bajas serán las que porcentualmente más se beneficien, con un recorte del 5% respecto a la actualidad para los que declaran hasta 12.450 euros. Sin embargo, en su bolsillo lo notarán poco por el menor nivel de sus ingresos, y el ahorro implicará hasta 62,25 euros.
Esta cantidad irá aumentando progresivamente en función de la cuantía declarada hasta alcanzar los 342 euros, que será la mayor bajada. Y de ello se beneficiarán los que cobran 60.000 euros, pese a que en su caso, porcentualmente, el recorte es del 3,60% respecto al tipo vigente.Los que tributan en los siguientes tramos se irán beneficiando, pero ya en menor medida, hasta llegar al de 90.000 euros. Los contribuyentes de esta última escala salarial solo se ahorrarán 42 euros.
Con la tabla impositiva pactada por el cuatripartito, los restantes 6.000 ciudadanos sujetos al IRPF pagarán más, entre un 0,58% (los de 100.000 euros) y un 2,13% (para los que declaran 500.000 euros). En estos casos, la nueva cuota íntegra irá de 18.650,75 a 120.500,75 euros, pagando entre 108 y 2.508 euros adicionales al año.
Su entrada en vigor será con la de los presupuestos a principios de año, pero se aplicará con efectos retroactivos al 1 de enero de este año, por lo que se notará en la próxima declaración de la renta. También afectará igualmente a las retenciones en las nóminas de 2023 en función del alcance de su impacto.
Desde la DGA se subraya que esta "actualización" de los tipos de la escala del IRPF es una "propuesta permanente y progresiva" y desestima el planteamiento de la oposición de aplicar, además, una deflactación al considerarla regresiva. No obstante, la propuesta se someterá ahora a las negociaciones con los partidos de la oposición en el trámite parlamentario.
Doce autonomías lo han bajado Con su decisión, Aragón se sumará a otros doce gobiernos autonómicos que han anunciado previamente rebajas en el IRPF, los de Andalucía, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid, Navarra, Comunidad Valenciana, Galicia, País Vasco, Asturias y Murcia. Solo tres se han negado a hacerlo, los socialistas de Baleares, Extremadura y La Rioja, mientras el catalán estudiaba después del verano deflactar el impuesto, sin que haya trascendido su decisión al respecto.
De este modo, Aragón seguirá a la cabeza en presión fiscal por IRPF para las rentas medias y bajas. Los aragoneses que declaran 20.000 y 30.000 euros tienen ahora la mayor carga tras los catalanes y los que perciben hasta 45.000 solo tienen por delante a los navarros y extremeños, según el informe sobre fiscalidad autonómica elaborado este año por el Consejo General de Economistas, previo a los anuncios. Esta realidad no cambiará porque el grueso de las autonomías también han anunciado rebajas. Lo que sí podrá sostener el Gobierno de Lambán es que con la reducción planteada se va a igualar el tipo autonómico al estatal en los primeros cuatro tramos, para los que declaran hasta 35.200 euros. Los restantes, son más altos, hasta tres puntos para las rentas de 130.000 y 150.000 euros.
