El Instituto Aragonés de la Mujer albergará un punto fijo de atención a maltratadas

El Gobierno aragonés redobla los esfuerzos para atender a las víctimas de la violencia de género. Con 34 mujeres asesinadas en lo que va de año en España, una de ellas en Aragón, y 24 menores huérfanos, la directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), María Goikoetxea, insistió ayer en que "mujeres y hombres tienen que ser iguales en derechos y libertades" e instó a "reforzar la prevención y la sensibilización" desde la infancia para acabar con esta "lacra". Anunció, además, que la sede del IAM contará con un punto fijo con profesionales que prestarán a las víctimas de maltrato una atención multidisciplinar, y que será el "precedente" de los tres centros de crisis que habilitarán en la Comunidad. Está previsto que empiece a funcionar antes de que acabe el año.

Compareció Goikoetxea ante la Comisión Institucional, a petición de Cs, para informar sobre las medidas adoptadas por su consejería para afrontar la violencia de género en el medio rural. Explicó, al respecto, que se está elaborando un informe con la situación de cada una de las 33 comarcas (ya se han analizado 23), con reuniones con más de 130 profesionales, que permitirán trazar un diagnóstico profesional y presentar propuestas de mejora.

El Pacto de Estado contra la Violencia de Género resulta, en su opinión, vital al promover la sensibilización, que se debe plantear desde diversas áreas. En el Instituto Aragonés de la Juventud se trabaja en talleres para jóvenes; desde Ciudadanía, en reforzar puntos de encuentro.

Se refirió Goikoetxea al presupuesto destinado a plantar cara al maltrato, que ha pasado de 253.000 euros en la legislatura de 2011 a 2015 a 1.741.000 euros en lo que va de año, solo para labores de sensibilización. También se ha ampliado el convenio con el Colegio de Abogados, que pasa de 221.000 a 268.000 euros. "Se está haciendo un esfuerzo enorme. Se han incrementado los importes y nuestra intención es seguir trabajando para llevar más recursos al medio rural", recalcó.

Beatriz García, de Cs, incidió en la necesidad de "mejorar el empleo de la mujer en el mundo rural" y reivindicó que "los poderes públicos deben hacer un esfuerzo para paliar la desigualdad". Celebró la puesta en marcha de la iniciativa ‘Juntas en las comarcas’. Para facilitar la conciliación, Goikoetxea anunció que trabaja con varios ayuntamientos del medio rural para poner en marcha ‘casas canguro’ en locales sin uso, dentro del programa corresponsables. Y siempre que es posible, se ofrecen los empleos a vecinos de la zona, detalló.

Lamentó Ana Cristina Sainz, del PP, que las víctimas de violencia machista hayan "aumentado un 20,1% en el último trimestre" y que en las zonas rurales la violencia machista alcance "cotas aún más dramáticas por el aislamiento de las mujeres que la sufren". También se refirió David Arranz al aumento de casos, para reprochar a la directora del IAM que "sus políticas no funcionan". Se mostró convencido el de Vox de que los puntos violeta "no tienen ninguna utilidad práctica" y aseguró que "nunca la mujer se ha sentido más desprotegida de ser asaltada y violada como ahora". En su opinión, algo tiene que ver que "estemos conviviendo con personas con una cultura incompatible con la nuestra y con el resto de la mujer".

Goikoetxea hizo hincapié en las diferencias entre violencia de género y violencia intrafamiliar y reivindicó que «el feminismo debe ser una política de Estado». Insistió en que hay que tratar el maltrato como "un problema estructural que nos atañe a toda la sociedad".