prisiones 

El 30% de los presos de Zuera están tratados con medicación psiquiátrica

El sindicato Acaip-UGT denuncia la falta de medios sanitarios para atender a los internos con problemas písquicos en el día de la Salud Mental.

El sietema informático de la prisión de Zuera se ha modificado por módulos en los últimos dos años y se comunican con la torrre.
El sietema informático de la prisión de Zuera se ha modificado por módulos en los últimos dos años y se comunican con la torrre.
Guillermo Mestre

La celebración del día mundial de la salud mental ha llevado al sindicato Acaip-UGT a denunciar que el 30% de la población del centro penitenciario de Zuera está actualmente en tratamiento con medicación psiquiátrica y más del 20% ha intentado de alguna manera quitarse la vida.

Fuentes penitenciarias reconocen que en las prisiones de Aragón habitualmente se detecta entre los internos la patología dual (trastorno mental unido a algún tipo de adicción) con esquizofrenia y/o el trastorno de la personalidad. Otros de los problemas con los que se enfrentan es que tienen que tratarlos con benzodiacepionas, neurolépticos y otros fármacos como pregabalina o gabapentina, entre otros.

Ante una afección tan numerosa, Acaip-UGT recuerda que en el centro penitenciario de Zuera, donde ahora hay unos 1.100 presos (con dos módulos en obras), hay un déficit de personal de 49 vacantes con carácter general, pero en la parte de los facultativos deberían tener 9 médicos, pero la coyuntura laboral los ha dejado en 4.

Falta personal especializado en salud mental”, sostiene un sindicalista de la prisión de Zuera y la manera de tratarlos se limita a “medicamentos”. De hecho, reconoce que la tasa de suicidio en las cárceles es “ocho veces más” que en en la población en general y detrás de esos casos suele estar la enfermedad mental como causa detrás de muchas de esas muertes.

A la hora de notificar estos datos, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias admitió en el año 2020, el último donde quedan registros, que 7.432 internos en las prisiones de toda España causaron alta en las enfermerías de los centros penitenciarios por patologías psiquiátricas, que supondrían el 41,6% de los ingresos.

Una causa reciente en Daroca 

En este sentido, recordaron que a mediados de septiembre pasado un interno con problemas mentales intentó degollar a otro preso en la cárcel de Daroca, pero la víctima consiguió librarse de la agresión y, al final, resultó con varias heridas en el cuello.

A consecuencia de lo ocurrido, este interno fue trasladado al Hospital Psiquiátrico Nuestra Señora del Pilar, en Zaragoza, para que lo atendieran mejor, dada su situación mental. El interno trasladó una mejoría casi inmediata a su familia con el cambio de centro, según pudo saber HERALDO.

De hecho, el sindicato Acaip-UGT denuncia que el sistema penitenciario cuenta únicamente con dos hospitales psiquiátricos (en Sevilla y Foncalent, Alicante) dedicados al cumplimiento de medidas de seguridad privativas de libertad impuestas judicialmente. “En realidad, no actúan como hospitales de referencia para la atención psiquiátrica estrictamente hablando, por lo que esto se realiza en las enfermerías y módulos de los centros penitenciarios”, denuncian los sindicalistas, al precisar que no disponen de medios en un entorno en el que el 5% de la población reclusa tiene algún tipo de enfermedad mental grave y crónica.

Para resolver esta coyuntura que va en aumento, el sindicato propone que la administración penitenciaria y las comunidades autónomas no dejen caer el sistema sanitario penitenciario. “No es solo una cuestión de atención médica, se trata de la más elemental asistencia y de no establecer una doble pena a quienes se encuentran privados de libertad, sin obviar la grave alteración del orden y los problemas de seguridad que genera en los centros penitenciarios la falta de atención sanitaria”, concluyen.

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