Las autovías del Pirineo se ralentizan con inversiones que se alargan hasta 2028

El Gobierno solo podrá inaugurar el tramo Sigüés-Tiermas antes de las elecciones.

Operarios trabajando en los nuevos desvíos que se han abierto en las obras de la A-22
Operarios trabajando en los nuevos desvíos que se han abierto en las obras de la A-22
Javier Navarro

La propuesta de Presupuestos Generales del Estado para 2023 supone una ralentización de cuatro tramos todavía pendientes de las autovías del Pirineo A-21 y A-23: las variantes de Sabiñánigo y Jaca, Puente La Reina-Fago y Lanave-embalse de Jabarrella-Sabiñánigo. La finalización de todo este eje fundamental para el desarrollo económico de la provincia se retrasará al menos hasta 2028. Para entonces, habrán pasado más de 25 años desde que se puso la primera piedra del corredor Huesca-Jaca-Pamplona, donde aún faltan por poner en servicio 40 de los 130 km.

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana destinará en 2023 una inversión de 26,1 millones de euros para estas autovías. De ellos, 5,1 servirán para acabar Sigüés-Tiermas, de 6,6 kilómetros. Este será el único nuevo tramo de carretera que podrá inaugurar el Gobierno central antes de las elecciones. Y eso que también se ha demorado ya que el plazo de ejecución estaba marcado inicialmente para marzo de 2021, pero se tuvo que aprobar un modificado que elevó el presupuesto de 51 a 63 millones de euros y que alargó también el final de los trabajos en 20 meses más.

El siguiente tramo más adelantado es la variante de Sabiñánigo, cuyo presupuesto también se ha encarecido de los 65 millones iniciales a cerca de 100. En este caso, el plazo de entrega está fijado para principios de 2023, pero con el modificado de obra se demorará un año más. De hecho, los PGE contemplan 15 millones para el año que viene y 19,1 para 2024.

"Es una buena noticia"

Pese a ello, la alcaldesa de Sabiñánigo, Berta Fernández, considera que "es una buena noticia que finalmente sigan apostando por continuar con este trabajo comenzado en la variante con esos 15 millones presupuestados para 2023, y los siguientes en 2024 para finalizar esta obra".

Hay otros tres tramos en las autovías del Pirineo donde ni siquiera han comenzado las obras. En dos de los casos, podrían iniciarse a final del próximo año si el Ministerio agiliza los trámites. Se trata de la variante de Jaca, que tiene consignada para 2023 una partida de 2,5 millones de los 116 en los que está presupuestada esta reclamada circunvalación; y Lanave-Sabiñánigo, con un coste estimado de 94 millones y para el que se han reservado 3 millones.

En el primer caso, la proyección de los Presupuestos para los próximos años prevé una inversión de 67,5 millones hasta 2027 por lo que todavía quedarían por comprometer más de 40. De ello se deduce que la finalización de la variante de Jaca no llegaría hasta 2028 siendo optimistas.

El alcalde, Juan Manuel Ramón, se muestra "contento" ya que la dotación prevista para 2023 supone que "ya por fin va a empezar esta importante inversión y una mejora necesaria desde hace mucho tiempo que sacará bastante tráfico no deseado de la ciudad, de vehículos pesados y mercancías peligrosas, que hoy pasan por viales rodados y peatonales". Y es que recuerda que con el nuevo trazado por el norte de la ciudad "se minimizará el riesgo que ahora tenemos respecto al tráfico de este tipo de vehículos y nos acercará más a otros destinos, además de facilitar el acceso al calle del Aragón, por parte de usuarios, vecinos y residentes".

Ramón ha pedido una reunión al Ministerio para que les informen de los plazos de licitación, adjudicación e inicio de obras confiando en que puedan ver máquinas ya a mitad de 2023 "porque 2,5 millones dan para empezar", dice el alcalde de Jaca.

También en el tramo Lanave-Sabiñánigo se han consignado 65 millones para los próximos cuatro años por lo que faltarían otros 26 que alargarían el plazo de entrega hasta 2028 como mínimo.

La alcaldesa Berta Fernández espera que con esos 3 millones presupuestados puedan comenzar las obras en 2023 "permitiendo arrancar ese último tramo que nos queda para terminar con la A-23 en el municipio de Sabiñánigo y poder decir que tenemos unas comunicaciones del siglo XXI, que es lo que todos estamos deseando", señala.

Puente La Reina-Fago, parado

Y finalmente hay un tramo que ni siquiera tiene reservada el próximo año una partida económica suficiente para poder licitar las obras ya que solo se han consignado 500.000 euros. Se trata de los 11,6 kilómetros entre Puente La Reina y Fago. Tiene un coste estimado de 85 millones de euros pero la propuesta de PGE no incluye previsiones de nuevas partidas para los próximos años.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión