logística
El almacén de La Muela estará listo en dos semanas, pero la apertura se retrasa un año
Amazon demora la apertura de la nave, en la que trabajarán 1.500 empleados, por la ralentización de la venta por Internet. En agosto acabó el complejo de Plaza y retomará ya la selección de plantilla para abrir en 2023.
La ralentización de la economía y fundamentalmente de las ventas por internet tras el fin de la pandemia ha llevado al gigante del comercio electrónico, Amazon, a frenar su expansión logística en España. La decisión se ha traducido en la suspensión de la construcción de nuevos almacenes, de la que se ha salvado Zaragoza porque las obras ya estaban muy avanzadas y la inversión era estratégica. Eso sí, ha demorado su puesta en marcha hasta el año que viene pese a que las instalaciones de La Muela se entregarán en dos semanas y las de Plaza están listas desde mediados de agosto. Oficialmente, la compañía opta por guardar silencio.
Cualquiera que circule por la autovía de Madrid puede comprobar las dimensiones del complejo construido en el polígono Centrovía, de 141.836 metros cuadrados, pendiente de los remates de urbanización y que está presidido por una planta de clasificación de paquetería de 35.420 metros cuadrados.
La compañía valenciana Itercon entregará la obra el próximo 3 de octubre, aunque el personal de mantenimiento de Amazon lleva días en su interior comprobando todo el entramado logístico con el objetivo de recepcionar la nave en el plazo pactado, tal y como atestiguaron a este diario varios de los trabajadores. "Está todo listo para poder abrir, pero ya nos comunicaron hace unos meses que la apertura se iba a retrasar", indicaron dos técnicos, que como el resto pidieron quedar en el anonimato por las estrictas normas de confidencialidad de la multinacional.
Aunque la nave parece acabada tras un año de obras, los operarios siguen ultimando trabajos de albañilería y electricidad para dejar todo listo. La cartelería exterior está instalada, con las indicaciones en español y en inglés y el característico logotipo de Amazon, aunque para culminar la urbanización exterior aún queda por montar barandillas, bolardos, aparcabicis y las marquesinas para las paradas de autobús para que se resguarde la futura plantilla.
El logo de la fachada, a la espera
Los planes iniciales pasaban por poner en servicio este almacén a lo largo del otoño, pero se trasladó en primavera que pese a mantenerse los plazos de construcción se alargaría finalmente su puesta en funcionamiento un año. "Se ha instalado hasta el mobiliario de las oficinas y solo nos han pedido que no instalemos de momento el logotipo de Amazon en la fachada", añadió el personal consultado.
Esta reprogramación afectará a la contratación de los 1.452 trabajadores previstos en triple turno, cuya selección tendrá igualmente que esperar.
La multinacional tiene margen, ya que dispone en la plataforma logística de unas instalaciones similares, gestionadas por DHL. En ambos casos son de media milla, la denominación que Amazon da a las naves que reciben los suministros de proveedores y de sus complejos centrales (los de primera milla) y que preparan los pedidos de los clientes para su distribución a través de las estaciones logísticas, como la que se inauguró el pasado otoño en Plaza.
La misma suerte ya corrió el gran almacén central de Plaza, el calificado en el argot de la compañía de primera milla. Será el más grande de todos, con una nave de 60.396 metros cuadrados, rodeado de viales y cientos de plazas de aparcamiento para los camiones de suministro y los vehículos de los futuros trabajadores. En este caso, su previsión es fichar una plantilla de 189 empleados y llegar a contratar a 515 para la época de máxima actividad del año, en los meses de diciembre y enero, coincidiendo con la campaña navideña y de rebajas.
En este caso, llegó a seleccionar al personal y enviarlo a Barcelona a principios de año para su formación, pero estando allí se les comunicó que se iba a paralizar la apertura prevista a mediados de agosto y que se les daba la posibilidad de trabajar a otros centros. Solo unos pocos están teletrabajando en Zaragoza para la compañía, que ahora prevé empezar de nuevo la selección de plantilla con el objetivo de que se incorporen en el primer semestre de 2023.
