El ambiente en la estación de Delicias: "Si de cinco días libres uno me lo paso en la estación, vaya gracia"
La interrupción durante cinco horas de la línea de alta velocidad ha ocasionado trastornos a numerosos viajeros en Zaragoza.
Este lunes que era menos lunes para los que hoy empezaban sus vacaciones no ha resultado lo que esperaban para quienes han elegido la estación de Delicias como punto de partida. Un robo de cable en un punto de la línea de alta velocidad a la altura del municipio tarraconense de Santa Oliva ha mantenido cortada durante cinco horas la circulación de todos los trenes de larga distancia en la línea de alta velocidad entre Cataluña y Madrid, así como los de otros destinos como Bilbao.
Renfe ha anunciado el restablecimiento "paulatino" de la circulación, si bien Adif advierte de importantes "demoras". Los trenes han comenzado a llegar con cuentagotas pasado el medio día. A las 12.30 ha salido el primer AVE con destino Barcelona desde la Estación Delicias de Zaragoza y hasta pasadas las 13.00 no ha llegado el primer convoy para viajeros que tenían un billete a Madrid.
La oficina de Renfe ha registrado desde primera hora largas filas de usuarios contrariados y nerviosos. Entre ellos estaba Tomás Blasco, que tenía previsto viajar a Bilbao con sus dos hijos:. "Nos tienen que dar alguna solución. Con niños es más complicado todavía", dijo resignado. El mismo destino tenía Carmen Ruiz, que viajaba también con sus dos hijos para pasar las vacaciones. "Yo tenía todo planificado y depende de a qué hora llegue finalmente se me van a truncar los planes. Si de cinco días libres, uno me lo paso en Delicias, vaya gracia", lamenta.
Algunos usuarios, desesperados, intentaron comprar otros billetes cuando la línea ni siquiera se había reestablecido ni se sabía cuando se iba a resolver la incidencia. De hecho, las máquinas vendieron billetes hasta entradas las 10.00, a pesar de que el servicio ya llevaba paralizado tres horas.
De vacaciones, de consultas médicas y de trabajo
Miguel Angel Gorriti entraba a trabajar a las 14.00 en Madrid, pero no podrá llegar a tiempo. "Yo he cogido el tren en Pamplona y nadie me ha avisado de nada. De saber que me iban a dejar tirado en Zaragoza, me hubiese cogido mi coche o hubiese buscado otra solución", se ha lamentado. "Lo están gestionando mal porque hay poco personal para informar de lo que está sucediendo y de cómo tenemos que actuar. No ponen buses ni dan soluciones", ha denunciado.
Dolores Gómez viajaba este lunes a Barcelona para una consulta médica. "No he podido avisar de que no llego a tiempo", relató Gómez, que optó por sentarse en la sala de espera junto a su familia al ver que el retraso iba "para largo".
La situación resultó ser particularmente estresante para quienes tenían que estar en su correspondiente destino a una hora establecida. "Tengo un vuelo a las 15.00 en Madrid y tengo que llegar como sea", aseguró una zaragozana mientras corría con su maleta en busca de una solución. "No quedan coches de alquiler y los taxis son muy caros", lamenta la joven, que no sabe aún cómo llegará a Barajas. Las empresas que se dedican al alquiler de coches se quedaron sin vehículos a primera hora de la mañana. "A las 8.30 ya no tenía ningún coche", explicaron desde Sixt.
El taxi ha sido la solución para los que no tenían margen de tiempo. "Tengo compañeros que han cogido a viajeros que querían ir al aeropuerto de Barcelona y al de Madrid", explica Alberto Arias, taxista de Zaragoza. El coste, según Arias, oscila entre 350 y 400 euros a los aeropuertos de Barajas y El Prat.
La incidencia afectó a todos los viajeros de larga distancia
"Nos han dicho que tenemos que esperar tres horas hasta que salga nuestro tren a Miranda de Ebro", explica Violeta Cigher, que viaja junto a sus dos hijos de 15 y 6 años. "Con niños es más complicado. Nosotros regresamos de Rumanía. Hemos llegado al Aeropuerto de Zaragoza y ahora estamos aquí parados", relata la madre.
María Alegría tiene 88 años y viajaba desde La Rioja hasta Granada. "Me he levantado a las 5.00 para coger el tren de Calahorra y he llegado a Zaragoza a primera hora de la mañana. No sabía que todos los trenes estaban cancelados y no se cuando llegaré a mi destino. Para mí está siendo complicado porque tengo una edad", explicó Alegría sobre las 13.00.
