meteorología

Radiografía de un tórrido verano en Aragón

En Zaragoza, 15 de las últimas 16 noches han sido tropicales; en Teruel, ninguna. La media de las temperaturas máximas en Torla, a las puertas de Ordesa, está al nivel de las de la capital aragonesa.

Ola de calor en Zaragoza.
Dos personas descansan a la sombra en Zaragoza el pasado fin de semana.
Guillermo Mestre

De las últimas 16 noches, en Zaragoza se han superado los 20 grados de temperatura en 15 ocasiones. En Huesca, han sido 14. Son las llamadas noches tropicales, esas en las que los termómetros no acaban de bajar y apenas permiten conciliar el sueño. El tórrido inicio del verano aragonés nos deja, cuando apenas se acaba de superar su primer mes, un altísimo porcentaje de noches tropicales. Desde que se iniciara esta estación, en Zaragoza y en Huesca casi la mitad de las noches se ha superado esa temperatura de 20 grados.

Esta es una de las manifestaciones de un verano que está arrojando temperaturas de récord. La intensidad y, sobre todo, la continuidad del calor está provocando que las temperaturas medias se hayan disparado en la gran mayoría de las localidades aragonesas. Tanto las máximas como las mínimas. Los registros de lo que llevamos de mes de julio dan de media entre 3 y 7 grados más que los meses de julio de años anteriores.

Curiosamente, el verano comenzó con bajada de temperaturas en Aragón. Los días previos al cambio de estación fueron muy calurosos, con hasta 41,9 grados en Zaragoza el 17 de junio, por ejemplo. El final de ese mes fue de temperaturas mucho más moderadas, al igual que el inicio de julio; pero tras la primera semana de este mes los termómetros apenas han dado un respiro casi en cualquier punto de la Comunidad.

En esa primera semana de mes ya hubo dos noches tropicales en Zaragoza, pero fue a partir del día 9 cuando comenzó la ola de calor casi continua que hemos sufrido y que esta semana -por fin- parece que da una tregua. Desde el 9 hasta el 25 de julio solo ha habido un día en el que la capital aragonesa no haya superado los 35 grados. Los 40 se han sobrepasado en ocho ocasiones. El pico de temperatura se alcanzó el domingo día 17 con 43 grados en la estación meteorológica del barrio de Valdespartera. En ese periodo entre los días 9 y 25, la capital aragonesa solo ha podido disfrutar de dos noches con menos de 20 grados.

Datos preocupantes en el Pirineo

Los datos en Huesca son muy parecidos, salvo por el hecho de que en la capital del Alto Aragón al termómetro le cuesta más saltar los 40 grados -solo lo hizo el 16 de julio-. Las jornadas con más de 35º y con noches por encima de los 20 sí son equiparables en número a las de Zaragoza. En Teruel se han superado esos 35 grados incluso más días que en Zaragoza, ya que lo ha hecho de manera ininterrumpida entre el 9 y el 25 de julio. Sin embargo, no se han llegado a rebasar los 40 grados en ningún momento y han podido bajar de los 20 grados todas las madrugadas. En un verano de noches tropicales generalizadas en la mayor parte de Aragón, en Teruel aún no se ha registrado ninguna.

En Cerler, a más de 2.300 metros de altitud, este año las temperaturas son 4,5 grados más altas que en julio del año pasado

El abrasador verano aragonés deja datos extremos y preocupantes en lugares que habitualmente son más frescos. Un claro ejemplo es Torla, localidad a más de 1.000 metros de altitud y a los pies de Ordesa y el Monte Perdido. Entre el 8 y el 25 de julio, en esta localidad se han superado los 35 grados todos los días. Sus temperaturas máximas dan una media este mes de 36,4 grados, casi el mismo que las de Zaragoza capital, en plena ribera del Ebro (36,9º). El registro de julio de esta localidad pirenaica es 5,8 grados superior al del mismo mes del año pasado y 4,6 mayor que el de 2020. En la estación meteorológica de Cerler-Cogulla, a más de 2.300 metros de altitud, las temperaturas medias han sido de 19,9 grados en las máximas y de 12,2 en las mínimas. En ambos casos, son 4,5 grados más que en el mes de julio del año pasado.

Pese a estar prácticamente a la misma altitud que Torla, los registros de Albarracín, en la provincia de Teruel, arrojan temperaturas algo más frescas, lo que indica la crudeza de este verano en el Pirineo. En la localidad turolense ‘solo’ ha habido nueve días este mes con más de 35 grados, la mitad de los que ha sufrido Torla. La media de las temperaturas máximas en Albarracín es de 33,5 grados en lo que llevamos de mes, casi tres grados menos que en Torla.

En la provincia de Zaragoza, además de los datos de la capital, llaman la atención los de Quinto. Allí la media de las temperaturas máximas registradas en julio es de 37,2 grados, superior a la capital aragonesa. En Quinto se han superado los 35 grados en 21 de los 35 días que llevamos de verano (en Zaragoza han sido 18), aunque las noches tropicales han sido ‘solo’ 12 (por las 17 de la capital aragonesa).

Un respiro esta semana

Para esta semana, las previsiones hablan de una ligera moderación de las temperaturas. En Zaragoza capital, por ejemplo, hasta el domingo no habrá temperaturas por encima de 35 grados, mientras que las mínimas bajarán todos los días de los 20. Además, hay posibilidad de lluvias tanto el jueves como el viernes. Para el domingo y el lunes sí que se espera una nueva subida de temperaturas, con máxima de 38 grados y mínima de 21 previstas para el primer día de la semana que viene.

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