comarca del aranda

Más de 380 fotografías para honrar a Pomer

Pedro Pérez, de 78 años, ha trabajado durante año y medio en un libro que recoge la historia de 55 familias de su pueblo.

Pedro Pérez, con un ejemplar del libro de Pomer.
Pedro Pérez, con un ejemplar del libro de Pomer.
José Miguel Marco

Más de 380 fotografías, testimonios de 55 familias y el amor y la dedicación de Pedro Pérez han sido los ingredientes indispensables para que el libro ‘Realidades y anécdotas de los pomerianos’ pueda ver la luz en agosto. "Ha sido un esfuerzo", reconoció este hombre que nació hace 78 años en Pomer y que ha estado año y medio recopilando datos, testimonios e imágenes. "Me han dado, por carta o en mano, hasta 820 fotografías y yo me quedaba enamorado mirándolas. Finalmente, aparecen unas 380", explicó.

La mayoría de los vecinos –ahora residen una veintena de personas pero en los años sesenta eran alrededor de 400– no han dudado en participar con imágenes e incluso anécdotas. "Cada uno me ha contado su historia, aunque algunos no han querido participar", señaló.

Entre las páginas se puede rememorar la aventura de Gregorio Muñoz, abuelo de Pedro, quien en un intento de eludir la mili no dudó en pasar "un día y una noche en cuclillas debajo de una mesa". Y lo consiguió. "Cuando lo midieron, dio dos centímetros menos, así que no dio la talla para ir a la mili", relató. Francisca Ezquerra ha contado la historia de su abuela Matilde, a la que adoraba;y Jaime de Calcena aparece junto al Papa Juan Pablo II, en la celebración de unas bodas de oro. También se recoge la biografía de la familia Pérez Cisneros, conocidos como Toavías, que tuvieron 15 hijos y "la Diputación les hizo una casa". Todas las familias aparecen con sus apodos y, en algunas ocasiones, hasta se incluye un árbol genealógico.

El libro también homenajea a tres mujeres con solera, las que hasta hace un mes eran las tres centenarias de la localidad. Consuelo y Rosaura tienen 103 años, mientras que Florinda falleció con la misma edad en mayo. La portada es un dibujo de José L. Bellod, de 1991, en el que aparece la torre, la plaza y el Ayuntamiento de la localidad.

Este proyecto nació en plena pandemia, cuando Pérez se animó a escribir un manuscrito biográfico para que sus nietos, que viven en el extranjero, "tuvieran un recuerdo" suyo. "Están encantados", apuntó. En él narra cómo en 1958 dejó el pueblo, como otros muchos vecinos, para buscar suerte en Zaragoza. Empezó en el oficio de sastre, a lo que se dedicó hasta su jubilación. Y ahora, logrará que la historia de Pomer no se diluya en el tiempo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión