JJOO
El COE comunica al Gobierno de Aragón que no habrá candidatura conjunta para los JJ. OO. de 2030
Desde la DGA se considera que esta decisión se debe a la "intransigencia" de Cataluña.
El sueño olímpico Pirineos 2030 toca a su fin. Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE), certificará este martes por la tarde el fin de un proyecto en que dos comunidades, Aragón y Cataluña, han sido incapaces de sellar un acuerdo. La DGA tiene ya la comunicación oficial del COE de que desecha la candidatura conjunta, y culpa de ello a la "intransigencia" de Cataluña para trabajar "en pie de igualdad". Declinan realizar más valoraciones. Aguardarán a que Blanco explique si renuncia a atender la petición de la Generalitat de presentarse en solitario.
La candidatura nació, desde sus inicios, herida de muerte. Las primeras desavenencias surgieron hace un año, cuando desde Cataluña se definió el proyecto como Barcelona Pirineus 2030, intentando relegar a Aragón a un papel secundario. Tuvieron que intervenir Blanco, el presidente de Aragón, Javier Lambán, y el ministro de Deportes, Miquel Iceta, para asegurar a la DGA que las dos comunidades optarían a los Juegos "en pie de igualdad". Y con un reparto "equilibrado" de las pruebas que en realidad nunca se dio.
Tras una negociación fallida, de la que salió una propuesta que "avalaron" la Generalitat, el COE y el Estado, pese a la oposición manifiesta de Aragón, no se impulsó ninguna rectificación. De hecho, se certificará este martes el fin del proyecto sin que el Comité Olímpico haya dado una respuesta oficial a la última propuesta de Aragón, en la que se repartían las pruebas en cuatro lotes.
Cuando la Generalitat manifestó la semana pasada su intención de presentar una candidatura en solitario, la consejera de Presidencia, Mayte Pérez, y Lambán advirtieron de que cualquier propuesta de Juegos alejada del "proyecto de país y de Estado" que defiende el Ejecutivo aragonés "tendrá una respuesta absolutamente contundente" que llevará a "todos los ámbitos nacionales e internacionales" porque se estaría generando "un problema territorial muy grave y una crisis política también muy grave". Y se elevó al máximo la tensión.
En la parte catalana, este lunes cargaron contra la DGA y contra el Gobierno central, a los que culpa del fracaso del proyecto, que podría retomarse para 2034, pero quizá bajo otro formato y protagonistas. ERC acusa a Iceta de perder una oportunidad y de ceder al chantaje de Lambán. "Deberá explicar por qué deja perder oportunidades para Cataluña", reprochó. "Ha habido boicot de Aragón y un silencio cómplice del Gobierno", cargó Junts, que estima que "se han priorizado los intereses anticatalanistas del PSOE de Aragón".
Lo cierto es que ni la Generalitat ni el COE han tenido voluntad de ceder ni un ápice de su posicionamiento inicial en una propuesta inicial demasiado similar a la que planteaba la Generalitat en su proyecto en solitario. Solo cedía a Aragón el esquí de fondo y el biatlón, que se desarrollarían en Candanchú, porque en Cataluña carecen de instalaciones para albergarlo, a menos que se afrontara un coste extra de unos 25 millones de euros.
El elemento que más discordia ha suscitado es el esquí alpino, que el Govern rechazó compartir con Aragón. La disciplina reina en las pruebas de nieve implica inversiones en las estaciones de esquí catalanas con dinero público, que las situarían al mismo nivel que las aragonesas.
La reacción de los partidos de la oposición en la Comunidad no se hizo esperar. El presidente del PP-Aragón y alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, abogó por "buscar responsables". Incidió en que hay que saber "qué ha ocurrido" para que pueda retirarse "un proyecto ilusionante" que iba a traer inversiones millonarias para el Pirineo aragonés y catalán.
Mientras, Blanco deberá despejar este martes la duda de si el COE apoya una candidatura unitaria e independiente o de si aplaza cualquier nuevo intento a la cita olímpica de 2034.
