La Cámara de Cuentas alerta de que la DGA dedica más dinero a pagar intereses que a invertir

Peña califica la situación financiera de "delicada" y lamenta la elevada deuda, que alcanzó los 9.106 millones en 2020.

Javier Sada, presidente de las Cortes, Alfonso Peña, de la Cámara de Cuentas y Jesús Guerrero del PAR.
Javier Sada, presidente de las Cortes, Alfonso Peña, de la Cámara de Cuentas y Jesús Guerrero del PAR.
Europa Press

El presidente de la Cámara de Cuentas, Alfonso Peña, advirtió este jueves de la "delicada" situación financiera del Gobierno de Aragón, que se manifiesta en indicadores como el remanente negativo de tesorería, superior a los mil millones, y, especialmente, la evolución del endeudamiento. Esto aboca a tener "escasas" posibilidades de inversión y a la "preocupante" realidad de dedicar más dinero a pagar los intereses de la deuda que acometer infraestructuras.

Así lo expuso en su comparecencia en el pleno de las Cortes para presentar la cuenta general de 2020, en la que lamentó que "solo" se destinaran 152 millones a acometer inversiones y que la ejecución fuera la más baja de todos los capítulos del presupuesto, con un 70,4%, 24 puntos por debajo del cómputo global del presupuesto. "Un año más, hemos destinado más recursos a pagar intereses de la deuda que a ejecutar inversiones, 157 frente a 152 millones", subrayó.

Además, destacó que el hecho de que el 30% de las inversiones reales no se llegaran a acometer ponía de manifiesto "dificultades de gestión" en la Administración aragonesa.

Peña también incidió en el "hecho positivo" de que se cerrara 2020 con superávit, la primera vez desde 2003, aunque se deba a la inyección extraordinaria de Madrid por la covid. Pero al mismo tiempo, añadió, la DGA siguió endeudándose hasta los 9.106 millones, 389 más que el ejercicio anterior y que tuvo que amortizar parcialmente al año siguiente al superar sus necesidades de financiación.

En su exposición, enfatizó que pese al impacto que supuso la pandemia no detectaron un número de errores e incumplimientos muy distinto al de otros años. Y eso que obligó a adaptar sustancialmente las cuentas, hasta el punto de hacer necesarias hasta 333 modificaciones de crédito por un importe de 1.037 millones, más de una quinta parte del dinero disponible. Esto supuso un incremento del 84,3%..

Peña volvió a lamentar la elevada tasa de temporalidad en la plantilla de la DGA, que ha aumentado 13,7 puntos desde 2012 para llegar al 48%, lo que afecta a 28.844 de los casi 60.000 empleados públicos. "Se constata la poca eficacia de las ofertas de empleo público para resolver este grave problema", aseveró.

La diputada popular Ana Cristina Sáinz fue la más incisiva, criticó "la opacidad" en la gestión de los fondos y cargó contra el cuatripartito por "no ser capaz" de atender las recomendaciones "más importantes de la Cámara de Cuentas". José Luis Saz (Cs) incidió en la insuficiencia financiera, Marta Fernández (Vox) criticó la "cultura del déficit" en la Administración y Álvaro Sanz destacó las medidas extraordinarias adoptadas pese a la "situación estructural que se repite año tras año". Los socios del cuatripartito defendieron la gestión en un entorno extraordinario.

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