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Las atenciones por adicciones crecen un 10% en Aragón y el alcohol vuelve a ser la principal causa

El Centro de Solidaridad atendió el año pasado a 1.231 personas, con una mayor impacto por la pandemia, y todas sus unidades asistenciales están al completo. 

Pilar Aznar, Carlos Gómez y Jesús Sánchez durante la presentación de la memoria de 2021.
Pilar Aznar, Carlos Gómez y Jesús Sánchez durante la presentación de la memoria de 2021.
HA

La pandemia continúa incrementando las atenciones por adicciones en Aragón. El último informe de la Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza - Proyecto Hombre (CSZ-PH), presentado este jueves, señala que durante el pasado año atendieron a un total de 1.231 personas, casi un 11% que en 2020. La cifra también es ligeramente superior a la registrada en 2019, cuando se alcanzaron los 1.220 usuarios. Y si se suma la ayuda dada a los familiares, desde la asociación se atendió en 2021 a 1.718 personas. 

"En el año 2020 los movimientos de las personas estaban muy limitados y eso limitó nuestras actuaciones", ha reconocido Jesús Sánchez, director de CSZ-PH, quien ha  incidido en que  durante estos primeros meses de 2022 no se ha percibido un descenso de la demanda. Las unidades asistenciales recibieron la pasada semana 40 interesados en pedir en una cita, mientas que el centro residencial (Proyecto Hombre) tiene sus 45 plazas ocupadas y "con lista de espera". "La estancia media es de 7 meses. Se hace un diagnostico y tratamiento previo en las unidades ambulatorias, luego están en la comunidad terapéutica y después vuelven a sus unidades asistenciales para continuar el tratamiento de reinserción", ha explicado. 

El alcohol vuelve a ser la principal causa de atención (276 casos), aunque la cocaína (271) también se encuentra en las primeras posiciones. "El consumo de alcohol está muy ligado a lo social, a los bares. Cuando estos cerraron por el confinamiento, se empezó a evidenciar a nivel familiar", ha detallado Sánchez. Asimismo, ha destacado el aumento de atenciones a mujeres, que ha pasado de 223 en 2019 a las 244 que acudieron durante el año pasado. En este caso, ha incidido, el tratamiento es "diferente" al de los hombres, debido al perfil que presentan. Ellos tienen un "patrón de conducta" semejante al de las personas que pueden ejercer el maltrato y ellas, según ha destacado Sánchez, a sufrirlo. 

Entre los jóvenes, que suponen alrededor del 8% de los tratamientos, las principales adicciones son el alcohol y el cánnabis. En este segmento de edad, ha recordado Sánchez, no solo se atiende el "consumo abusivo" sino otros riesgos como "la violencia familiar o el fracaso escolar". La edad media de los atendidos es de 39,5 años. 

Déficit económico

Las cuentas anuales difundidas por la fundación evidencian un déficit económico de casi 44.000 euros. "No cubrimos gastos", ha señalado el presidente de la fundación CSZ-PH, Carlos Gómez, quien ha recordado que esta cuantía la cubre la Iglesia: "Es un compromiso del papa Francisco". La presidenta del Comité Ejecutivo, Pilar Aznar, ha señalado los problemas derivados de los gastos provocados por la covid y el incremento del IPC y de los carburantes. "Hemos pasado dos años duros y complicados", ha enfatizado, al tiempo que ha recalcado la labor llevada a cabo por los trabajadores y voluntarios.

En estos momentos, están pendientes de firmar un nuevo acuerdo con el Gobierno de Aragón para concertar su actividad y confían en que de este modo se pueda mejorar la financiación de la fundación. "Eso no va a impedirnos que continuemos trabajando como venimos haciendo desde 1985", ha apuntado Sánchez.

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