TRansporte ferroviario

La estación de Goya de Zaragoza cumple diez años con más viajeros de trenes regionales que de cercanías

La segunda terminal de Zaragoza tras Delicias acumula más de 3,4 millones de usuarios, el 70% de Media Distancia.

Un tren de la línea de Cercanías Casetas-Miraflores, en la estación de Goya.
Un tren de la línea de Cercanías Casetas-Miraflores, en la estación de Goya.
FRANCISCO JIMENEZ

La estación de Goya acaba de cumplir diez años y en este tiempo ha atraído a más viajeros de trenes regionales que de cercanías. Su estratégica ubicación en el centro de Zaragoza y, sobre todo, la capacidad de hacer transbordos con el tranvía ha impulsado su utilización entre los usuarios que acuden desde otros punto de la Comunidad, hasta suponer el 70% de los que suben y bajan en su andén.

Los datos oficiales facilitados por Renfe apuntan a que en la década transcurrida han pasado por las instalaciones más de 3,4 millones de viajeros, lo que le convierte en una pieza clave del tráfico ferroviario en Aragón y en la segunda estación con más clientes en Zaragoza, solo superada, y por muy poco, por la de Delicias.

El jefe de Media Distancia y Cercanías de Renfe en Aragón, Rafael Lázaro, subraya a este diario que la puesta en servicio de la estación, cuatro año después de la inauguración de la línea Casetas-Miraflores, supuso todo un revulsivo. Y más todavía la circulación combinada, ya que los regionales circulan como trenes de Cercanías en el tramo urbano. "Se ha acercado todo el servicio ferroviario al centro de Zaragoza y se ha logrado capilarizar la distribución por el resto de la ciudad con los medios urbanos de transporte", apunta.

El punto de inflexión se vivió realmente cuando la compañía Renfe tomó la decisión de convertir los trenes regionales en cercanías en el citado tramo urbano, lo que duplicó el número de convoyes disponibles. De este modo, cualquier persona puede subirse en los convoyes que vienen del resto de Aragón entre las estaciones de Delicias y Miraflores pagando el billete de un cercanías. "Su gran valor añadido es la versatilidad de conexiones", añade Rafael Lázaro.

Su evolución ha sido desde entonces meteórica, pasando de 189.514 viajeros en los regionales en 2013 a 326.297 en 2018, una racha que la pandemia truncó con los confinamientos y las posteriores restricciones a la movilidad como consecuencia de la pandemia. Aun así, el año pasado empezó a recuperar el pulso y ya registró 232.320 usuarios. Y el primer trimestre del año augura un posible récord, puesto que se han contabilizado 74.161 clientes.

La que no tira es la línea de Cercanías, que sigue anclada en poco más de 180.000 usuarios anuales en Goya, una cifra que apenas se ha logrado superar desde su estreno, con la excepción de 2017, cuando se rozaron los 190.000.

La estación ha ido actualizando los servicios, como los sistemas de lectura de billetes con códigos de barras y Bidi que se implantaron hace dos años, las máquinas de autoventa para adquirir cualquier billete de Renfe o la posibilidad de disponer de wifi gratuita.

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