semana santa

La Puebla de Híjar recupera el Tren del Tambor

A la procesión, en tren: un convoy histórico permitirá viajar desde Zaragoza para presenciar el momento cumbre de la Semana Santa local.

El Tren del Tambor, una adaptación del Tren Azul de Azaft, circula a una velocidad media de 85 kilómetros por hora.
El Tren del Tambor, una adaptación del Tren Azul de Azaft, en una imagen de 2019.
B. Severino

La Puebla de Híjar recuperará este año uno de sus referentes de Semana Santa con la llegada a la estación de ferrocarril del Tren del Tambor, un convoy configurado con cinco vagones y una locomotora históricos que partirá de la estación de Delicias de Zaragoza a las 15.00 del día 16 de abril para que 225 viajeros puedan asistir al momento culminante de la programación semanasantista local, el cese del toque de tambores y bombos a las diez de la noche del Sábado Santo. Todavía estarán a tiempo de contemplar, previamente, la última procesión, el traslado de los pasos al Calvario a las 18.30.

El tren histórico es propiedad de la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías (Azaft) y será fletado por el Ayuntamiento y la Asociación de Cofradías de Semana Santa con el patrocinio de Turismo de Aragón. El presidente de Azaft, Carlos Abadías, afirma que, en este caso, tan importante como llegar al destino es «disfrutar del viaje y del paisaje. Se trata también de viajar por viajar». El tren será recibido con el toque de tambores de las cofradías a la llegada a la terminal de La Puebla de Híjar, un sonido que acompañará a los viajeros durante toda su estancia en la localidad hasta que, a las 22.00, llegará el momento más emocionante de la Semana Santa local, el cese de la percusión, que en un suspiro sustituirá el estruendo más ensordecedor por el silencio más desconcertante.

Circula a una velocidad media de 85 kilómetros por hora. Lo importante es disfrutar del viaje

El alcalde, Pedro Bello, se mostró ilusionado por retomar la tradición del Tren del Tambor tras el parón impuesto por la pandemia. Bello recordó que la llegada del tren histórico se retomó en 2019 tras una interrupción de 14 años como consecuencia de las obras de reforma realizadas en la estación de partida en Zaragoza. El alcalde señaló que la recuperación de esta tradición contribuye a potenciar «el día más grande de la Semana Santa de La Puebla». Será, a su juicio, un factor que acercará la celebración «al cien por cien» de su potencial.

El alcalde explica que en 2019 el tren, con capacidad para 225 pasajeros, «se llenó» de zaragozanos deseosos de vivir la Semana Santa de la Ruta del Tambor en primer persona. Señala que la partida a las 15.00 desde la capital aragonesa permite al pasaje salir de viaje después del almuerzo, evitando el colapso de la hostelería local para atender a un número tan alto de clientes. La disponibilidad de este medio de comunicación permite un cómodo regreso a Zaragoza tras el silenciamiento de los tambores y bombos, «el principal acto» de la celebración local.

Los cinco vagones están tirados por una locomotora ‘japonesa’ de la década de 1970

La llegada del convoy se complementa con actividades en torno al ferrocarril, como los matasellos conmemorativos que utilizará Correos en la estafeta ambulante del tren –otro matasellos se dedicará, en la oficina de turismo, a una cofradía local–. Bello apunta que el convoy, con vagones construidos en un abanico temporal que va del 1920 a los años setenta del siglo XX, es un auténtico museo ambulante que estará a disposición del público en el apeadero del Barrio de la Estación de forma gratuita.

Para atender a los pasajeros, Azaft despliega un equipo de 22 voluntarios que se dedican a explicar a los viajeros y al público que visita el convoy la historia de los vagones, que corresponden, como explica Abadías, a la composición de un «tren nocturno», con un coche cama, dos restaurantes, una estafeta y un salón ministerial –que fue utilizado por el mismísimo dictador Francisco Franco–. De la conducción se encarga personal de Alsa Rail.

El presidente de Azaft se muestra también expectante ante la recuperación de la expedición Zaragoza-La Puebla de Híjar. Diez días antes de la partida, se habían vendido ya 120 de sus 225 localidades. Carlos Abadías está convencido de que se agotarán las plazas disponibles. Destaca las ventajas de esa alternativa de transporte para disfrutar de la Semana Santa de la Ruta «sin mover el coche». Advierte de que la prisa no es bien recibida en este tren retro, donde la velocidad máxima es de 100 kilómetros por hora y la media, de 85.

Abadías recuerda que el tren circuló 18 años seguidos desde su primera salida en 1991. Luego quedó atascado durante más de una década debido a las obras de la estación de Delicias, su punto de partida, aunque también hace parada en la estación de Goya. El presidente de la Asociación de Amigos del Ferrocarril anima a los zaragozanos a participar en el romántico viaje a bordo de un convoy que resume un siglo de historia ferroviaria por el módico precio de 30 euros. Los entusiastas aficionados al ferrocarril de Azaft «atienden al pasaje y explican el origen del tren. La gente disfruta de la experiencia», afirma.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión