Los fabricantes de piensos ven inminente el desbloqueo de las importaciones de cereal

Afirman que el Gobierno ha prometido medidas inmediatas para agilizar la entrada de maíz de Estados Unidos y de Argentina.

Un momento de la cosecha de cereal de invierno en una finca de Visiedo (Teruel).
Un momento de la cosecha de cereal de invierno en una finca de Visiedo (Teruel).
Red Arax

Todavía no ha se anunciado de forma oficial, pero el desbloqueo de importaciones de cereal procedente de Estados Unidos y de Argentina con las que suplir el grano que no llegará desde Ucrania podría ser "inminente". Así lo celebra la Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos (Cesfac), que aseguró este miércoles que según informaciones contrastadas por esta organización de las administraciones nacional y comunitaria, "España va a autorizar de manera inmediata las medidas que permitirán en breve plazo reabastecer las necesidades de alimentación del ganado".

La invasión rusa a Ucrania -el granero de Europa- ha dejado a España sin el principal abastecedor de maíz y girasol, lo que obliga a mirar hacia nuevos mercados en los que disponer del cereal necesario para cubrir las necesidades que exige la alimentación de la cabaña ganadera. Un grano que podría llegar desde el continente americano, donde, según los datos de Cesfac, en estos momentos hay disponibles e invendidas 13,6 millones de toneladas de maíz en EE. UU., 7,5 millones de toneladas de maíz en Argentina y 100.000 toneladas de semilla de girasol y 400.000 toneladas de torta de girasol también en Argentina. Además, y a partir de finales de marzo, estarán disponibles otros 15,4 millones de toneladas de maíz de cosecha nueva argentina. "Esas cantidades servirían para cubrir sobradamente las necesidades de la producción española de alimentos compuestos para animales hasta el enlace de campaña y buena parte de la demanda europea", señaló la organización empresarial. Pero para eso es necesario que se flexibilicen las exigencias sanitarias a la importación en Europa, ya que los productores de estos países utilizan semillas transgénicas e incluso fitosanitarios que no están autorizados en el Viejo Continente.

"Estamos satisfechos con las promesas que nos ha hecho la administración española de que se van a tomar ya las medidas para asegurar las importaciones extraordinarias de las materias primas que necesitamos para no parar nuestra actividad", afirmó Jorge de Saja, director general de Cesfac, que dejó claro que a los fabricantes de piensos les da igual que dichas medidas se tengan que tomar desde España, desde Bruselas o conjuntamente, pero advirtió que la situación es tan crítica que exige que se tomen ya, como se les ha prometido.

"En el caso de maíz OGM, del que pueda tener una variedad de semilla o parte de ella cuyo proceso de autorización en la UE aún no esté terminado, no debería haber ningún problema legal, ni siquiera es necesaria una medida extraordinaria ya que el propio reglamento de la Unión Europea prevé, en el caso de la alimentación animal, una tolerancia para que se pueda importar aunque pueda haber esa presencia que sería mínima", insistió De Saja, que recordó que, por lo tanto, "España puede hacerlo de forma inminente".

Tampoco habría problemas en los productos procedentes de Argentina con presencia de fitosanitarios no permitidos en la Europa comunitaria. El director general de Cesfac aseguró que hay ejercicios de control que demuestran que desde 2020 apenas se han encontrado uno o dos casos con trazas de cantidades infinitesimales de ese tipo de productos, y "en cualquier caso existe precedentes normativos para que la Administración española o la comunitaria no lo permita". De hecho, explicó, este viernes está prevista una reunión en Bruselas en la que los Estados miembros votarán la anulación temporal de esos límites para evitar cualquier problema. "Esperamos que España vote lógicamente a favor", añadió.

De Saja se mostró totalmente convencido de que se tomarán las medidas necesarias y urgentes, porque de lo contrario, advirtió, las consecuencias serían catastróficas. "No quiero ni pensarlo. Cada vez queda menos tiempo para que nos quedemos sin abastecimiento suficiente", por lo que si no se actúa con inmediatez, "habrá que empezar a planificar los sacrificios selectivos de animales". Un escenario, advirtió, que nadie quiere y que la ganadería, que arrastra una situación muy complicada desde mucho antes de la invasión de Ucrania, no se puede permitir.

"Conteniendo el aliento"

Para los fabricantes de piensos aragoneses las noticias que llegan desde Cesfac, confederación a la que pertenecen, suponen un cierto alivio, aunque como reconoce Enrique Bascuas, presidente de la Asociación de Fabricantes de Piensos de Aragón y gerente de la empresa Ars Alendi, los productores todavía están "conteniendo el aliento". Será decisiva, dice, la reunión de este viernes en Bruselas, porque como señaló este míércoles Bascuas, el desbloqueo de estas importaciones "es la única opción, lo demás es desabastecimiento".

Bascuas reconoció que "hay mucha preocupación" en las industrias, porque aunque de momento hay reserva con el grano almacenado en las empresas y en puerto "hay existencias para entre 45 y 60 días", lo cierto es que dado que hay compromisos a futuro, "a partir de las próximas semanas podría haber momentos puntuales de falta de suministro". A esta incertidumbre, señaló, hay que sumar los disparados precios del cereal y la energía. "Por algún sitio se va a romper la cadena", lamentó. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión