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El alcalde de Novallas, absuelto de prevaricación por la Audiencia de Zaragoza
Un concejal del PP se querelló contra el regidor del PSOE por frenar un proyecto de una granja de cerdos.
La Audiencia de Zaragoza ha absuelto al alcalde de Novallas, Jesus Fernández, (del PSOE) de un delito de prevaricación del que le acusó el concejal Jaime Vázquez (de PP), que es presidente de la Comunidad de Regantes San Marcial, por dilatar y obstaculizar un proyecto de una granja de cerdos.
El auto judicial considera que el permiso del uso del agua para esa explotación porcina dependía de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y no del Ayuntamiento de Novallas, lo que provocó unas comprobaciones posteriores. Pero este retardo del permiso no fue provocado de forma maliciosa y deliberada por el alcalde.
La sección sexta de la Audiencia de Zaragoza confirma el primer auto del Juzgado de Tarazona, que precisó que "el abastecimiento del agua que realmente se iba a utilizar no era el que inicialmente indicó el propio solicitante" y supuso obligar a "posteriores comprobaciones e informes" porque la competencia del nuevo sistema excedía las atribuciones del consistorio y correspondía a la CHE, como informó la Diputación Provincial de Zaragoza.
La petición de licencia del concejal fue presentada en junio de 2016 y el Ayuntamiento de Novallas lo aprobó en un pleno celebrado un año después, en junio de 2017. Pero el retraso de la concesión del permiso definitivo se produjo una vez que se recibió el informe de la Diputación Provincial de Zaragoza, que se encargó para precisar de dónde se sacaba el agua y de dónde procedía.
"La sentencia confirma lo que siempre he mantenido, que la intención del Ayuntamiento de Novallas conmigo al frente nunca fue obstaculizar la puesta en marcha de la granja, sino la de asegurar que el proceso se hacía cumpliendo la legalidad", ha incidido el primer edil.
En ese sentido, Jesús Fernández ha recordado que el abastecimiento de la granja se iba a llevar a cabo mediante un "pozo ilegal", denunciado por el Seprona, por lo que no se podía conceder la licencia hasta que ese problema no hubiera sido resuelto.
"Parece increíble que siendo presidente de la Comunidad de regantes San Marcial pretendiera obtener el agua de esta forma irregular, sin premiso de la Confederación y sin licencia de obras, algo que por supuesto, desde el ayuntamiento, no podíamos consentir", ha agregado el alcalde.
