La covid infecta a más de 11.000 niños aragoneses en diez días y 'barre' el resto de patologías

Los niños se han convertido en el objetivo favorito de la séptima ola de covid en Aragón. Durante los últimos diez días, los menores de 14 años concentran el 25,7% de los contagios de coronavirus oficialmente registrados en la Comunidad, es decir, uno de cada cuatro. Eso sí, el virus ha logrado ‘barrer’ de las consultas de pediatría el resto de patologías (bronquitis, faringitis, laringitis…), que este año -a diferencia del anterior- no habían faltado a su cita con el inicio del invierno.

En los últimos diez días se han contagiado de covid en Aragón 11.261 menores de 14 años. Son, con mucha diferencia, la franja de edad más afectada por este pico de la séptima ola. De hecho, este grupo de población es el único que no ha iniciado con claridad el descenso de la curva. Todas las franjas de edad llevan diez días con una caída en la incidencia más o menos acusada. Sin embargo, en el caso de los niños no ha dejado de crecer hasta este martes, cuando inició un tímido descenso que está por ver si acaba de confirmarse durante estos días. La incidencia acumulada semanal de los menores de 14 años en Aragón está en torno a los 4.500 casos por 100.000 habitantes, el doble que la media total de la Comunidad.

Esto no ha sido así durante toda la séptima ola, ni mucho menos. La franja de edad de los menores de 14 años tomó la cabecera como la más afectada el 15 de enero, justo una semana después de la vuelta al colegio. Solo una semana antes, al final de las vacaciones de Navidad, presentaban una incidencia muy moderada, ya que de hecho tenían por delante otras cuatro franjas de edad como las más afectadas (los de 45-54 años, los de 25-34, los de 35-44 y los de 15-24, por este orden). La curva de los menores comenzó a inclinarse hacia arriba en paralelo al resto pero, en vez de bajar como todas las demás desde hace diez días, ha seguido subiendo. 

“Actualmente casi todo lo que vemos es covid, aunque afortunadamente son casos que presentan síntomas catarrales leves, como mucho con algo de fiebre”, señala Teresa Cenarro, presidenta de la Asociación Aragonesa de Pediatría de Atención Primaria. Aunque han aumentado las hospitalizaciones de los más pequeños, lo han hecho “como consecuencia del aumento tan grande de casos”, apunta Cenarro.

El impacto de la séptima ola ha sido tal que el virus ha acabado con toda la ‘competencia’ que tenía en los niños. “Ha sido muy curioso, porque en noviembre había mucha neumonía, laringits, bronquitis, boca-mano-pie… De repente ha sido llegar esta ola y desaparecer todo lo demás”, apunta Cenarro, quien señala que tampoco la gripe ha hecho acto de presencia todavía entre los más pequeños.

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La pandemia ha trastocado por completo los ciclos de las enfermedades habitualmente invernales de los niños. El año pasado, el impacto de la covid hizo que desaparecieran, y trasladó su aparición a una época poco habitual, a las puertas del verano. Esta temporada, estas patologías sí que habían llegado puntuales al inicio del verano, pero la irrupción de ómicron las ha vuelto a desplazar.

Marina Francés, enfermera que atiende a la población infantil en el centro de salud del Arrabal de Zaragoza, confirma que estos días están “casi todo el tiempo con casos de covid”. La actividad rutinaria se reduce a la pandemia y a las revisiones, ya que “las ‘itis’ (bronquitis, faringitis, laringitis…) han desaparecido”. “Justo antes de la sexta ola volvimos a tener estas enfermedades, pero de repente han desaparecido”, certifica.