zaragoza

Gallur condena el crimen de la joven de Cortes y arropa a la familia del homicida

Los vecinos se han concentrado este miércoles a mediodía para mostrar su repulsa por el asesinato de Sara Pina, por el que ha sido detenido en Francia su marido, natural del municipio zaragozano.

Concentración en Gallur
Concentración en Gallur
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Los vecinos de Gallur, localidad de la que es natural José María Uruñuela, de 41 años y presunto autor del asesinato de su mujer, de 38, en Tudela, se han concentrado este miércoles a mediodía en la plaza de España para condenar el primer crimen machista de este de 2022 en España.

Durante el acto, convocado por el consistorio gallurano y  la Asociación de Mujeres ‘María Domínguez’, se guardó un minuto de silencio en recuerdo de Sara Pina, la maestra natural de Cortes con la que estaba casado el presunto homicida. La concentración se celebró a las puertas de la casa consistorial y sirvió para arropar también a los padres y hermanos del investigado, que reside en el municipio ribereño. «Son gente extraordinaria y lo están pasando muy mal», manifestó la alcaldesa, Yolanda Salvatierra.

La regidora explicó que el pasado 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, acordaron convocar una concentración cada vez que haya que lamentar otra víctima. Lo que no podían imaginar entonces es que  la primera fallecida de 2022 sería una joven de un pueblo vecino y que el presunto asesino iba a ser un gallurano que vivía en Tudela pero seguía ligado al municipio.

El hallazgo del cadáver de la joven se produjo el pasado lunes, 10 de enero, pero los investigadores creen que su muerte a cuchilladas se produjo durante el fin de semana del 8 al 9. Todo apuntaba desde el principio a que el autor del crimen podría haber sido su marido, que acabó siendo detenido este martes en una localidad al norte de Burdeos.

Un juez de Tudela había dictado una orden internacional de arresto contra el gallurano, lo que permitió que una patrulla de la Gendarmería francesa diera el alto a su furgoneta cuando circulaba por la A-10 (París-Burdeos). 

El huido había dejado su teléfono móvil en la vivienda conyugal, posiblemente, con la intención de que no pudieran rastrearlo. Sin embargo, olvidó que su furgoneta Peugeot Rifter, con la que se desplazaba a diario a trabajar a una granja de Tauste, contaba con un dispositivo GPS. Según publicó Diario de Navarra, fue precisamente este el que permitió averiguar que se encontraba en Francia y poner en alerta a la Gendarmería.

Sigue aún en Francia

El juez que investiga el crimen todavía no ha podido interrogar al sospechoso, ya que continúa en el país vecino a la que espera de su entrega a la Justicia española. Todavía no se conoce la fecha exacta, puesto que hay que cumplir con una serie de trámites procedimentales. En cualquier caso,  fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Navarra han indicado a HERALDO que dicha repatriación podría producirse «en breve». Será entonces cuando el instructor se pronuncie sobre el más que previsible envío a prisión del detenido.

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