alimentación
Cuando el tamaño de las empresas importa
La colaboración entre empresas y el apoyo institucional son clave en el crecimiento futuro del sector agrario que, según la DGA, podría duplicar su tamaño e impacto.
"Las cifras de la agroindustria van a crecer de cara al futuro y el empleo en este sector va a crecer". Este es el vaticinio que la directora general de Promoción e Innovación Agroalimentaria del Gobierno de Aragón, Carmen Urbano, hacía esta semana ante representantes del sector que participaron en una jornada técnica organizada por Aragón Digital Hub y que abordaba la importancia de la digitalización en el sector.
Pero para conseguirlo, Urbano instaba al sector a unirse. "Si nos unimos, podemos conquistar mercados, pero necesitamos creernos lo que somos, que es una potente realidad y un proyecto de futuro", afirmaba. Y es que uno de los grandes condicionantes que tiene este sector es el pequeño tamaño de sus empresas, algo en lo que también incidía el presidente de la Asociación de Industrias Alimentarias de Aragón (AIAA), Félix Longás. De hecho, el 85% de las empresas del sector no tiene más de cinco empleados, lo que supone "un problema a la hora de competir en aspectos como innovación, promoción e internacionalización".
Pero como las instituciones públicas disponen de ayudas, "tenemos que ponerlas a disposición del sector, explicarlas y acompañar a las empresas", incidía Carmen Urbano. Y eso es, precisamente, a lo que dedicó la directora general parte de su intervención, en la que recalcó que su Dirección General es, "sobre todo, de mercado", por lo que, entre otros, uno de sus principales retos es "gestionar la concurrencia competitiva a favor de la competitividad y la excelencia empresarial y particular de la capacidad de acceso a los mercados", explicaba.
Para ello, desde la Dirección General se van a movilizar 53 millones de euros hasta 2025 en dos convocatorias: la primera de ellas, dotada con 22 millones de euros, se abrió el pasado octubre y permanecerá abierta hasta el 15 de septiembre de 2023; la segunda, que se extenderá hasta septiembre de 2025, totalizará 31,8 millones de euros. En el período anterior, la movilización de este tipo de ayudas supuso la aprobación de 434 proyectos que significaron un esfuerzo inversor de 911 millones de euros procedentes del sector privado y 154 millones de euros de inversión pública. Otra de las apuestas de este organismo dependiente de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente será la de impulsar las figuras de calidad diferenciada, "muy vinculadas al territorio y que por ahora solo suponen el 6% de todo el volumen del sector".
Digitalización
Para lograr todos estos objetivos, el sector debe adaptarse a los nuevos tiempos y asumir un proceso de cambio que pasa por la digitalización, un proceso en el que Aragón Digital Hub, el organismo del Instituto Aragonés de Fomento (IAF), apoya y asesora a las empresas. "La digitalización es una directriz europea para ganar mayor competitividad y sostenibilidad", destacaba la directora del IAF, Pilar Molinero, quien vaticinó que "las empresas que no apliquen estas nuevas tecnologías están abocadas a la desaparición".
La jornada contó con la presencia de Susana Martínez, responsable de Innovación y RSC de Aldelis, que explicó varios proyectos del uso de la digitalización y nuevas tecnologías con diversos objetivos, que van desde la obtención de datos de preferencias de sus consumidores hasta la disminución del "fracaso" de los productos que se comercializan y que cifran en hasta un 70%; todo ello, para ofrecer a sus consumidores, que son el centro de su actividad, los productos que mejor satisfacen sus necesidades.
