ICT Ibérica mantiene resultados pese a sufrir un alza de costes del 30%

El fabricante de papel higiénico Foxy cerrará el año con 138.000 toneladas producidas y una cifra de negocio de 218 millones

Imagen de archivo del director general de ICT Ibérica, José Luis Pérez Quintana, en las instalaciones de la fábrica de papel en El Burgo de Ebro.
Imagen de archivo del director general de ICT Ibérica, José Luis Pérez Quintana, en las instalaciones de la fábrica de papel en El Burgo de Ebro.
Aránzazu Navarro

Industrias Cartarie Tronchetti (ICT Ibérica), que produce en El Burgo de Ebro papel higiénico de la marca Foxy, obtendrá en 2021 similares resultados a los del pasado año. Es más, el cierre del ejercicio será positivo, pese al incremento de costes que ha sufrido. «A pesar de las circunstancias del mercado y la subida del precio de las materias primas, las previsiones son producir 138.000 toneladas de papel y facturar en torno a los 218 millones de euros», señaló José Luis Pérez Quintana, director general de la empresa en El Burgo de Ebro, con una plantilla de 310 trabajadores.

«Nuestra marca sigue creciendo. La otra cara de la moneda está en los costes que se han disparado sin control convirtiendo 2021 en un ‘annus horribilis’», declaró. «Empezamos 2021 con una creciente escalada de precios de las principales materias primas, especialmente la celulosa, que ha alcanzado cifras récord históricas provocadas por una fuerte demanda del mercado chino», apuntó. Posteriormente, «se fueron añadiendo a este incremento los plásticos, el cartón y los productos químicos, esenciales en nuestro proceso productivo, sufriendo también situaciones puntuales de escasez en algunos de estos materiales». A este panorama, recordó Pérez Quintana, «se sumaron a partir de julio continuas subidas de los precios de la electricidad y del gas, hasta alcanzar al cierre de octubre un incremento acumulado que supera el 200%».

Estas subidas, según el director general de ICT Ibérica, han supuesto un incremento en los costes industriales de la empresa de más del 30% respecto a sus previsiones iniciales. «Nos queda», anticipó, «una dura y larga labor para poder ir repercutiendo al menos una parte». Y el escenario, advirtió, es susceptible de empeorar si se ejecuta la huelga del transporte antes de Navidad. «Movemos, entre entradas y salidas, más de 150 camiones al día y garantizamos el nivel de servicio en el plazo máximo de 72 horas. Por tanto, el efecto de una huelga de transporte sería muy negativo», dijo.

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