Los incidencia de la varicela cayó un 75% durante el último año, tras notificarse 793 contagios en todos los centros de Atención Primaria de Aragón durante 2020. El mayor descenso se produce entre los niños de 5 a 9 años, aunque también destaca la bajada notificada entre los menores de cinco años. Una tendencia que tanto desde Salud Pública como los profesionales de pediatría achacan al efecto de la vacunación. «El descenso observado en la incidencia desde 2016 ha sido a expensas de menores de 5 años y ha coincidido con el inicio de la vacunación sistemática en la primera infancia», se detalla en el último Boletín Epidemiológico.

En estos momentos, el calendario de vacunación de Aragón incluye la primera dosis de la vacuna contra la varicela a los 15 meses para todos los niños nacidos a partir del 1 de enero de 2015. Al cumplir los tres años reciben la dosis de refuerzo. Además, recuerda Teresa Cenarro, presidenta de la Asociación Aragonesa de Pediatría de Atención Primaria, a los 12 años se hace una «repesca» para aquellos que no la hayan pasado ni hayan recibido ninguna de las inyecciones. En este caso, se les pone la pauta completa con al menos un mes de diferencia e idealmente, dos. «Si ya han recibido una dosis, solo se les administrará la segunda», especifica el protocolo de vacunación infantil del Gobierno de Aragón.

«Llevamos cinco años con este protocolo y ya tiene sus efectos en la circulación del virus. Además, previamente a que se incluyera en el calendario de vacunación, había muchas familias que lo hacían de manera voluntaria –desde que en el año 2004 se dispensa en las farmacias–», explica Cenarro, quien lleva uno o incluso dos años sin ver un caso de varicela en su consulta: «Ahora los contagios son bastante anecdóticos». Yes posible gracias a la vacuna, puesto que anteriormente se trataban de «epidemias cíclicas» cada dos años. En estos momentos, según los datos de Salud Pública, se mantiene el patrón estacional característico –con máxima incidencia a finales de invierno y primavera–, pero los efectos son casi imperceptibles.

Aunque se trata de una enfermedad habitualmente infantil, debido a su «elevada» transmisión, también existe la posibilidad de vacunar a aquellos adultos que se den cuenta de que no la han pasado. Se sigue el mismo protocolo que cuando se cumplen 12 años. «El virus no circula porque el porcentaje de población vacunada es muy grande. Es lo mismo que se quiere conseguir con las inmunización frente a la covid», insiste la pediatra. La importante caída de contagios registrada durante el último año también se ha podido ver beneficiada por las medidas de prevención adoptadas frente al coronavirus.