micología
Una ventana al cultivo sostenible de setas
El proyecto ‘Culturfungi’, coordinado por Atades, busca promover el cultivo sostenible de hongos autóctonos de Aragón, tanto en espacios naturales como en invernadero.
Preservar el patrimonio micológico aragonés, potenciar el cultivo de setas y hongos de forma sostenible, tanto en bosques y montes como en invernadero; impulsar su conocimiento y gestión, o promover su aprovechamiento y comercialización en el sector agroalimentario y farmacológico. Estos son algunos de los objetivos del proyecto ‘Culturfungi: cultivo sostenible tecnológico de hongos sobre sustratos micoselvícolas y desarrollo de modelos de valorización con impacto social’, presentado la semana pasada en San Martín de la Virgen del Moncayo. La iniciativa está coordinada por el Centro Especial de Empleo Gardeniers de Atades y cuenta con financiación del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y del Gobierno de Aragón.
El proyecto, que durará cuatro años y tendrá una financiación de 150.000 euros, se llevará a cabo en el Parque Micológico de Albarracín, en el Moncayo y en la Peña Oroel, e incluirá la creación de un centro especial de empleo para personas con discapacidad.
El primer objetivo del proyecto pasa por identificar, estudiar y caracterizar distintas variedades de setas autóctonas que crecen de manera natural en los bosques y montes de Aragón, y que, actualmente, como ocurre con otras especies, se encuentran amenazadas por los efectos del cambio climático. "Lo que hacemos es conservar la biodiversidad. El primer trabajo es localizar esas setas y, a partir de ahí, caracterizarlas para conocerlas e intentar domar ese hongo, que sería un proceso equivalente al que se ha hecho con la trufa negra. Después de domesticar ese hongo, se va a intentar cultivarlo de forma planificada sobre sustratos micoselvícolas, que son restos forestales que provienen de podas o de explotaciones sostenibles y que los utilizamos para que los hongos puedan desarrollarse", explica Félix Arrizabalaga, gerente de Atades, que incide en que esa reutilización de recursos naturales refuerza el carácter de economía circular del proyecto.
La iniciativa, por tanto, contribuirá a mejorar la gestión de las explotaciones forestales desde un punto de vista ambiental y económico. "Además de asegurar y mantener la biodiversidad, permite contribuir a la explotación sostenible de los bosques", apunta el gerente de Atades. De este modo, del trabajo llevado a cabo con los hongos saldrán distintas líneas de actividad. "Una estará enfocada al aprovechamiento agroalimentario, para poder comercializar las setas tanto en fresco como transformadas, en seco o en harina; y la segunda línea estará relacionada con el desarrollo de productos para el sector farma. Muchos hongos tienen propiedades medicinales que en el modelo occidental han sido menos aprovechadas; lo que queremos es explorar cuáles son las posibilidades de cara al sector farma con líneas de medicamentos y complementos nutricionales", añade Félix Arrizabalaga.
Además de estas posibles líneas de actividad, el proyecto también pretende impulsar el micoturismo. "Una vez seamos capaces de controlar el ciclo de los hongos, podríamos hacer que la seta creciese de manera controlada en determinadas ubicaciones y organizar actividades micoturísticas. La persona podría cosecharlas y llevárselas a casa", señala Félix Arrizabalaga.
Integración
Otro de los elementos clave de este proyecto es la creación de un centro de empleo en torno al cultivo de hongos y setas dirigido a personas con discapacidad y que será coordinado por Gardeniers. "La idea es poder hacer el cultivo de los hongos; cultivar dentro de invernaderos distintas variedades de setas, aunque, a medida que vaya madurando el proyecto, nos gustaría poder producir nosotros nuestra propia materia orgánica a partir de los restos forestales del entorno en el que vamos a trabajar, y cultivar sobre esa base las cepas autóctonas que hayamos podido aislar dentro del territorio. Salvo las actividades técnicas, la gran mayoría de tareas las pueden realizar personas con discapacidad: recoger residuos, producir el sustrato y, después, todo el proceso de cultivo del hongo", comenta el gerente de Atades.
Cultivo en invernadero
Además de Atades, el proyecto cuenta con la participación de Qilex Consultora Forestal, la Sociedad Cooperativa Agraria San Atilano, el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), la Universidad de Zaragoza, el Grupo de Acción Social Asomo y los ayuntamientos de Tarazona y de Jaca. Asimismo, apoyan la iniciativa la Fundación Solidaridad Carrefour y el Ayuntamiento de San Martín de la Virgen del Moncayo.
Para las actividades técnicas, el grupo de cooperación contará con los investigadores del CITA y la Universidad de Zaragoza, que se encargarán de poner en práctica los ensayos de cultivo en ecológico sobre sustratos micoselvícolas en invernadero. "En invernadero, los residuos micoselvícolas se transforman en una especie de serrín que se combina con otros elementos vegetales para generar un sustrato rico y adecuado para el hongo. Una vez generado ese sustrato y esterilizado, para que no se desarrollen otros hongos o bacterias, se inocula el micelio del hongo en el sustrato orgánico hasta que empieza a florecer el hongo, crece y puedes cosecharlo", detalla Félix Arrizabalaga.
Con todo el conocimiento generado a partir de este proyecto se pretende beneficiar no solo a los participantes, sino a los agricultores de la zona o a los emprendedores que puedan desarrollar su negocio en el sector micológico. "Este es un proyecto demostrativo que, si sale bien, puede generar una oportunidad distinta a los cultivos tradicionales de la zona y contribuir a diversificar la actividad", concluye el gerente de Atades.
