tribunales
Condenado a un año de cárcel por agredir a un guardia civil durante la pandemia
El acusado salió sin mascarilla a bajar la basura y después de ser identificado intentó golpear al agente en las calles de Ejea de los Caballeros en la medianoche del pasado 1 de noviembre
El Juzgado de lo Penal 5 de Zaragoza ha condenado al ciudadano rumano Dorin G. C. a una pena de doce meses por un delito de atentado por una agresión contra un agente de la Guardia Civil en Ejea de los Caballeros el pasado 1 de noviembre en plena pandemia y fuera del horario legal.
La sentencia considera probado que el acusado bajo a tirar la basura sin mascarilla en la medianoche del día de Todos los Santos del año pasado y les dijo a los agentes de la Guardia Civil que estaba a esa hora en la calle «porque le daba la gana», a pesar de que la pandemia lo impedía esos días entre las 22.00 y las 6.00.
Al contestarles así, los agentes le pidieron que se identificase para proponerle una sanción administrativa por cómo había salido a la calle, pero como no llevaba la documentación encima lo acompañaron para su vivienda y se la enseñara. Los guardia civiles le explicaron que iban a proponerle una sanción, sin que el inculpado firmara ninguna denuncia.
Cuando salían del edificio en el que residía el acusado y recogían el vehículo, los agentes volvieron a ver al individuo que les seguía y les dijo: «ahora sí que me vais a llevar a la Policía». Eso fue el preludio de abalanzarse contra el guardia para intentar agredirle. Pero el agente pudo esquivarle con el brazo izquierdo y no le causó lesiones. Su compañero declaró que vio al acusado que agarrara a su compañero del brazo izquierdo.
El Juzgado de lo Penal 5 de Zaragoza considera que los hechos son constitutivos de un delito de atentado a un agente de la autoridad y le impone una pena de doce meses, que solicitaba el Ministerio fiscal.
La patrulla, que prestaba servicio en un vehículo camuflado, vio andando a esta persona sin mascarilla y le dio el alto. Los guardias se identificaron con sus placas reglamentarias y le preguntaron qué hacía a esas horas fuera de casa, cuando las restricciones impuestas para impedir la propagación de la covid-19 impedían estar en la calle entre las 23.00 y las 6.00 sin un motivo justificado.
El letrado de la acusación, particular que ejerce Jorge Piedrafita, letrado de la Asociación Española de Guardia Civiles (AEGC), incidió en que la magistrada entiende probado el relato de la acusación mostrado en el juicio.
