Los planes de cuenca de las nueve confederaciones hidrográficas, ahora en consulta pública hasta el 22 de diciembre, y que estarán listos la próxima primavera, son el mejor instrumento para proteger un recurso escaso, luchar contra su contaminación y gestionar mejor el riesgo de inundaciones y sequías. Lo dijo ayer en la feria Smagua Teodoro Estrela, director general del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco). «Hay una partida de 1.700 millones. Y 800 van destinados a la protección frente a inundaciones. «Estamos priorizando los proyectos más maduros y en el Ebro los hay», señaló, si bien uno de los problemas de estos fondos europeos es que hay que ejecutarlos muy rápido.

En este sentido, recordó que ya está en marcha la iniciativa ‘Ebro Resilience’, que se ejecuta en el marco del programa europeo Life 2020, que pretende actuar en algunas zonas del cauce para minimizar el impacto de las crecidas.

El director general del Agua hizo hincapié en que «el 40% de masas de agua en España no está en buen estado y su recuperación ambiental es el objetivo a alcanzar en 2027». Y para conseguirlo puso sobre la mesa la necesidad de mejorar en saneamiento y depuración ya que existen, dijo, 500 aglomeraciones urbanas, un 25% del total, no conformes a la directiva europea. Abogó también por luchar contra la contaminación de los acuíferos, que por el uso masivo de fertilizantes y pesticidas superan las concentraciones de nitratos permitidas, y hacerlo con el Real Decreto que se aprobará antes de final de año. La restauración de los caudales ecológicos y la recuperación de espacios emblemáticos como el Delta del Ebro, la Albufera de Valencia o el Mar Menor son otros de los desafíos que los planes de cuenca tienen que abordar, añadió.

«Tenemos problemas con el Mar Menor, una masa de agua que se ha deteriorado como consecuencia de las múltiples presiones a las que está sometida», reconoció Jesús García Martínez, presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura. «La sobreexplotación de aguas subterráneas y la contaminación por nitratos en general son problemas difíciles de solucionar y comunes al conjunto de las confederaciones», indicó. «La llegada de los fondos europeos es una oportunidad que no podemos dejar pasar», recordó.

«La gestión de las aguas subterráneas es muy importante en nuestra cuenca. El 75% de nuestros recursos son de origen subterráneo y el 50% los tenemos en mal estado o sobreexplotados», señaló por su parte la aragonesa Aránzazu Fidalgo, jefa de la Oficina de Planificación Hidrográfica (OPH) de la Cuenca del Júcar. «Apostamos por recuperar esa masas de agua en 2027 y estamos viendo cómo lo hacemos», dijo.

Miguel Ángel García Vera, de la OPH de la Confederación Hidrográfica del Ebro, habló de la gestión de sedimentos fluviales y su impacto en las crecidas así como de la estrategia ‘Ebro Resilience’. 

S. E.

Reconocimiento de la Feria de Zaragoza a la Confederación Hidrográfica del Ebro

Manuel Teruel ha entregado un obsequio a María Dolores Pascual, presidenta de la CHE al celebrar su 95 aniversario y ser la más antigua de España. Por su parte, Pascual ha agradecido el detalle y la presencia en Smagua del director general del Agua del Ministerio, de los presidentes de todas las Confederaciones Hidrográficas, algo inédito, y de los directores de Acuaes y Acuamed. Además, ha destacado la importancia de instituciones, empresas y ciudadanos para aportar iniciativas a estos nuevos retos de la gestión del agua.