logística

Amazon inicia la obra de su gran centro de devoluciones en el polígono de La Muela

La nave de clasificación ocupará 35.420 metros cuadrados y estará lista en un año tras una inversión de 18 millones.

Movimiento de tierras en la parcela ubicada en el polígono Centrovía, el pasado miércoles.
Movimiento de tierras en la parcela ubicada en el polígono Centrovía, el pasado miércoles.
HA

La multinacional estadounidense de comercio electrónico Amazon está cumpliendo sus plazos de implantación y ya tiene en marcha las obras de la gran nave de clasificación de paquetería promovida a su medida por Almericost en el polígono Centrovía de La Muela. La inversión rondará los 18 millones y se ejecutará en el plazo de un año para centralizar las devoluciones del sur de Europa.

Las máquinas de la constructora Vialex llevan días moviendo tierras en las catorce hectáreas que llegará a ocupar el centro logístico, presidido por una nave de 35.420 metros cuadrados. Allí está previsto que lleguen a trabajar casi 1.500 trabajadores en triple turno si se cumplen las previsiones reflejadas en el proyecto presentado a las administraciones implicadas. En unas semanas entrará la constructora valenciana Itercon, la misma que ha edificado junto a Cobra (del grupo ACS) dos de los tres centros de datos que la división tecnológica de Amazon ultima en Zaragoza y Huesca.

Este cálculo de trabajadores lo convierte en el más importante desde un punto de vista laboral de los cuatro centros logísticos con los que contará el gigante del comercio electrónico en Zaragoza y su entorno. Los otros tres se concentran en Plaza, donde dispone ya con un centro de reparto recién inaugurado y otro de clasificación, gestionado por DHL desde el pasado mes de agosto. A ellos se sumarán el próximo verano el gran almacén central que está construyendo junto al campo de golf La Peñaza. En total, creará 2.356 puestos de trabajo.

El proyecto de La Muela pasa por convertir el complejo en un centro de devoluciones, en el que la mercancía procedente de otros almacenes se clasificará y enviará a sus nuevos destinos en menos de 24 horas. De hecho, su funcionamiento se parecerá más a un proceso que a un almacenamiento.

El espacio central de la nave será diáfano, con una altura libre de doce metros para permitir la automatización y robotización si así lo requiere Amazon. El diseño está pensado al milímetro para agilizar la recepción, clasificación y posterior empaquetado: habrá una gigantesca zona de espera, donde la mercancía se ordenará paletizada en estanterías que ocuparán la mitad del espacio. En el área de clasificación contigua, con cuatro líneas de trabajo, se prepararán los pedidos y se clasificarán de nuevo para su expedición en la zona de espera.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión