Aragón da un paso más en el impulso a la creación de comunidades energéticas locales
Los proyectos innovadores encuentran en la actualidad barreras regulatorias que impiden probar otros modelos que podrían generar una mayor utilidad y mejor aprovechamiento de la energía.
![Reunion de directores generales de comercio en dinopiolis con Aliaga. 10/09/21. Foto: Javier Escriche[[[FOTOGRAFOS]]]](https://imagenes.heraldo.es/files/image_990_556/uploads/imagenes/2021/09/10/aliaga.jpeg)
![Reunion de directores generales de comercio en dinopiolis con Aliaga. 10/09/21. Foto: Javier Escriche[[[FOTOGRAFOS]]]](https://imagenes.heraldo.es/files/image_640_360/uploads/imagenes/2021/09/10/aliaga.jpeg)
El Departamento de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial del Gobierno de Aragón ha presentado al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico las observaciones a la consulta pública que ha abierto para elaborar la nueva normativa que regulará el ámbito del sector eléctrico.
Esta modificación tiene el objetivo de fomentar la I+D+i mediante proyectos piloto que estarán sujetos a normas especiales y tendrán excepciones respecto de la legislación anterior, ha informado el Ejecutivo autonómico en una nota de prensa.
Según ha señalado, el objetivo de estos informes es impulsar desde Aragón las comunidades energéticas locales. Los proyectos innovadores encuentran en la actualidad barreras regulatorias que impiden probar otros modelos que podrían generar una mayor utilidad y mejor aprovechamiento de la energía.
El propósito de la comunidad autónoma con el impulso de las comunidades energéticas locales es desarrollar la transición energética, incrementar la competencia, bajar los precios de la energía y descarbonizar la economía en territorios como el aragonés, que se caracterizan por su elevada dispersión, la baja densidad de población, por disponer de un tejido productivo basado en pequeñas y medianas empresas y por generar mucha más energía de origen renovable de la que consume, han apuntado desde el Gobierno regional.
Bancos de pruebas
El Ejecutivo central autorizó establecer bancos de pruebas regulatorias para introducir novedades, excepciones o salvaguardias regulatorias que contribuyan a facilitar la investigación e innovación en el sector eléctrico.
En Aragón, existen iniciativas, algunas apoyadas por sectores industriales y promotores de energías renovables, como los proyectos en futuras ubicaciones, como podrían ser Andorra y PLATEA, en Teruel. Se ha presentación la constitución de un proyecto piloto de Comunidad Energética Local que podría llevarse a cabo en Aragón desde 2022 hasta 2030.
La finalidad de esta iniciativa es hacer llegar las medidas propuestas en la legislación europea a territorios como el aragonés, caracterizados por una significativa despoblación, su potencial de producción de energía renovable y un bajo consumo interno en relación a su capacidad de producción.
Una nueva vía
Las comunidades energéticas locales y las redes de distribución cerradas abren una nueva vía para suministrar energía renovable autóctona y competitiva en territorios despoblados, como sería el caso de Teruel, haciendo de la energía una palanca importante de obtención de respuestas frente a desafíos que engloba el Reto Demográfico, como serían la atracción de industria descarbonizada, la generación de empleo estable o la inversión en infraestructuras.
La vinculación de infraestructuras de generación renovable a actividades industriales a municipios o agrupaciones de las mismas, reduciría notablemente el precio de la adquisición de energía por parte de los consumidores; eso permitiría no solo consolidar la actividad industrial existente, sino que fomentaría el asentamiento de nueva industria de una forma distribuida, contribuyendo a combatir el reto demográfico.
El cambio en el reglamento actual permitiría que pudieran acometerse acciones inmediatas, entre ellas, la vinculación directa de parques de generación renovable a actividades industriales, permitiendo una reducción del precio de adquisición de la energía. Este mecanismo podría aplicarse de forma inmediata mediante la utilización de los sistemas de energía renovable ya existentes o por construir.
El desarrollo de las comunidades energéticas locales y su integración con las redes de distribución cerrada habilitaría la creación de las propias comunidades, la atracción e implantación de nueva industria al lograr un suministro de energía eléctrica de origen renovable más barato y gestionable y la incorporación de instalaciones agropecuarias o prosumidores.
