Banco de Sangre de Aragón: solidaridad a través del plasma hiperinmune
Procede de 414 personas que han generado anticuerpos contra la covid para ayudar a otros enfermos. El Banco de Sangre dispone aún de unas mil unidades en reserva
El Banco de Sangre y Tejidos de Aragón ha jugado un decisivo y discreto papel en la lucha contra la pandemia del coronavirus con la donación de plasma de decenas de personas que han pasado esta enfermedad y han generado anticuerpos contra la infección. Estos donantes, alrededor de 414, han podido ayudar a pacientes que se enfrentan al virus en los hospitales, en combinación con los tratamientos que allí reciben.
Desde abril de 2020, el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón, entidad pública adscrita al Departamento de Sanidad del Ejecutivo autonómico, está impulsando la donación de plasma hiperinmune para destinarlo a pacientes de covid-19 y atender las necesidades existentes en los hospitales durante la pandemia. Diferentes estudios han concluido que determinados pacientes de coronavirus ingresados presentan una mejoría gracias a las transfusiones de plasma procedente de donantes que han superado la enfermedad y tienen anticuerpos neutralizantes.
Uno de estos estudios es el ConPlas-19, en el cual participaron el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón y el Hospital Clínico Lozano Blesa, cuyo objetivo era averiguar si el uso de plasma hiperinmune asociado al tratamiento estándar en pacientes con infección por coronavirus mejoraba los resultados clínicos al compararlo con el tratamiento convencional. Meses después, a finales de 2020, la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia concluyó que era "seguro" y ofrecía buenos resultados, siendo más efectivo "en la enfermedad moderada y en fases más precoces, y también en pacientes inmunosuprimidos".
La directora gerente del Banco de Sangre, Carmen Garcés, recuerda que después de la primera oleada de la pandemia, en primavera del año pasado, se prepararon reservas, alrededor de 350, que en la segunda se acabaron pronto. El altruismo de los ciudadanos, sin embargo, ha ido en aumento conforme se prolongaba esta emergencia sanitaria. Las donaciones de plasma hiperinmune que se han contabilizado desde que se impulsó esta iniciativa y hasta principios de este mes ascienden a 1.520.
Garcés explica que en otoño "hubo que buscar otras estrategias". De esta manera, comenzaron a detectar anticuerpos en las extracciones habituales para ver si podían ser susceptibles de donar plasma hiperinmune destinado a pacientes ingresados por coronavirus, y no reservarlo exclusivamente a quienes se habían recuperado de la infección por SARS-CoV-2: "Con eso aumentamos más rápidamente el ‘stock’". Incluso fue necesario contar con un turno de noche para poner en marcha este sistema de detección. En ese momento, resumió, "se necesitaba tener más plasma para poder suministrar todas las peticiones". Ese trabajo extra se mantuvo durante varios meses.
En esta sexta oleada, el nivel de ingresos es menor que en brotes anteriores, como consecuencia de la efectividad de la vacuna contra la covid y su menor impacto en la población más mayor. A principios de noviembre, por ejemplo, se llegaron a superar las mil hospitalizaciones (con más de 110 personas en uci); y en febrero se rozaron los 800 (y casi cien en intensivos). Aun así, según concreta Garcés, el pasado mes de julio se alcanzaron las 113 transfusiones de plasma. La reserva con la que cuenta el Banco de Sangre es de unas mil unidades, que es el número óptimo de ‘stock’ necesario para atender la demanda que se requiere y que le corresponde a la Comunidad teniendo en cuenta su población.
Las donaciones, asegura, no se han visto nunca interrumpidas. Sí ha habido que adaptarse a la situación y modificar en alguna ocasión los puntos de extracción itinerantes para no utilizar por seguridad los centros de salud: "Pero contábamos con locales que podían ajustarse a los requisitos que hacían falta". "A algunos de los que acudían por primera vez, sin experiencia, les aconsejábamos que primero hicieran una donación de sangre y, dos meses después, de plasma. Muchos de los que empezaron al inicio, hace más de un año, lo han cogido ya por costumbre", relata.
La donación de plasma hiperinmune se realiza mediante la técnica de aféresis, que consiste en la separación de los componentes sanguíneos durante el proceso de donación de sangre. El proceso tiene una duración de 45 minutos, aproximadamente. Los requisitos para realizarla son los mismos que para la donación de sangre: tener entre 18 y 60 años, pesar más de 50 kilos y presentar buen estado de salud, pero además se requiere haber generado anticuerpos contra la covid y que hayan pasado más de 28 días desde el alta.
Para conservar este plasma, que está a disposición de los hospitales, se congela a -30 grados. La directora gerente del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón pone de manifiesto que "se puede hacer una donación al mes sin problema", pero "al principio se espaciaba más y se realizaba cada dos o tres meses". De cada donación se extraen dos unidades de plasma, y algunos han podido acudir en varias ocasiones.
