Certest inicia en un mes las obras de su planta de vacunas y lanzará la producción en el otoño de 2022

Cuenta con 236 trabajadores y prevé contratar a 50 más para su desarrollo. La DGA le vende 26.000 m2 para que pueda crecer en San Mateo de Gállego.

Recreación de la planta y el bloque de oficinas
Recreación de la planta y el bloque de oficinas
Certest Biotec e Idom

La compañía aragonesa de biotecnología Certest Biotec tiene previsto comenzar en un mes las obras de su quinta y sexta fase de ampliación para acometer una planta de desarrollo y fabricación de vacunas en la que invertirá 50 millones de euros y que estará lista en septiembre de 2022. El objetivo es intensificar la investigación con la contratación de medio centenar de profesionales, que se sumarán a los 236 que ya están en plantilla, con el fin de lanzar vacunas propias basadas en la tecnología ARN mensajero para combatir enfermedades como la covid, cuya investigación implicará un desembolso similar, de 50 millones.

La empresa está especializada en la fabricación de pruebas PCR y antígenos, así como sus reactivos, y está decidida a expandir su actividad, como ya avanzó en la visita del exministro de Ciencia, Pedro Duque, el pasado mes de febrero. Tan solo está pendiente de obtener la preceptiva licencia municipal para comenzar los trabajos de una planta piloto de 13.218 metros cuadrados, que contará, además, con un módulo de oficinas anexo de 2.858 metros, que ha diseñado la consultora Idom. La colaboración ha sido fructífera, ya que esta misma ingeniería ha proyectado la sede inicial, de 2.545 metros, y las sucesivas ampliaciones acometidas desde 2015 en San Mateo de Gállego.

Estas instalaciones serán el germen para desarrollar futuras vacunas de ARN mensajero y producir los millares de unidades que se necesitarán para la fase de pruebas. Este intenso trabajo requerirá de entre tres y cinco años, según las últimas estimaciones.

Duplicar las instalaciones

El director general de Certest, Carlos Genzor, explicó a este diario que su aspiración es emular a BioNTech, la compañía alemana que desarrolló la vacuna que Pfizer está produciendo a escala mundial tras hacerse cargo de los ensayos clínicos.

Para ello, la biotecnológica aragonesa cuenta con 26.898 metros cuadrados para duplicar sus instalaciones ubicadas en el polígono Río Gállego II, en San Mateo de Gállego, cuando acabe en un año la sexta ampliación. Y será imprescindible para crecer cuando el desarrollo de las vacunas encaren la recta final.

La Consejería de Ciencia y Universidad ha facilitado la operación a través de la Fundación Aula Dei, que sacó esta parcela de casi tres hectáreas a la venta por concurrencia por 409.231 euros. Certest Biotec fue la única que se presentó y la apertura de ofertas, que se hizo el pasado viernes, confirmó que se la quedará por 410.000 euros. La operación pasa por implicar ahora al Ayuntamiento para que permute esta parcela de la fundación por la contigua a la de Certest, cedida a la DGA y que, por tanto, no le podía vender de forma directa.

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La consejera de Ciencia, Maru Díaz, avanzó su intención de declarar el proyecto de interés autonómico para facilitar la inversión y acelerar si cabe los plazos, ya que el sector médico-farmacéutico es "estratégico para Aragón". Díaz destacó que Certest surgió hace dos décadas y se desarrolló en el Centro Europeo de Empresas e Innovación de Aragón antes de abrir sus instalaciones en San Mateo. "Empezó con una sede de 2.500 metros y antes de acabar el año rematará su quinta y sexta ampliación para ocupar 26.000 con una plantilla de más de 200 personas", detalló.

Facilitar la operación

El director general de Certest indicó que disponer de la parcela contigua facilitará toda la operación, dado que la futura planta de producción que allí prevén construir deberá contar con la correspondiente licencia de fabricación de productos farmacéuticos, que otorga la Agencia Española del Medicamento. "Al ya tenerla para la sede actual, será todo más sencillo, porque será una ampliación de licencia y no una nueva", explicó.

La intención es desarrollar en la planta el principio activo de la vacuna, que es la clave para su posterior fabricación masiva. No obstante, se necesitará igualmente la alianza con una farmacéutica por el volumen que será necesario afrontar. Carlos Genzor indicó que el proceso será largo y que en esta fase se dispondría de ingresos con el retorno de la inversión inicial. Solo el año pasado multiplicó su facturación por diez, hasta alcanzar los 170 millones de euros.

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