coronavirus
Aragón roza los 5.500 contagios en siete días, la peor semana desde que comenzó el año
La incidencia ha pasado de 80 a 688 casos cada 100.000 habitantes desde el inicio de la sexta ola, hace tres semanas. La positividad supera el 21%, baja el impacto de los 15 a los 29 años y aumenta en el resto de grupos de edad.
El repunte de la covid va cada día a más. En apenas tres semanas,la Comunidad ha pasado de registrar una incidencia acumulada de 80 casos cada 100.000 habitantes a catorce días a 683, una cifra que no se alcanzaba desde inicios de febrero, en el peor momento de la cuarta ola. Salud Pública notificó ayer 925 nuevos contagios, y el índice de positividad supera el 21%, y cuadriplica el 5% que permitiría, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), dar la pandemia por controlada. Esta última semana, con 5.475 casos, es la que más contagios ha registrado en lo que va de año.
Las cifras más cercanas se dieron en la última quincena de enero, cuando se notificaron casi 5.000 positivos semanales. Y para encontrar una semana peor a la actual, según los datos de Salud Pública, es necesario retrotraerse hasta finales de octubre de 2020, coincidiendo con el pico provocado por los ‘no pilares’, que obligó a tomar medidas extremas para contener la pandemia y evitar el colapso en los hospitales. En esta ocasión, todavía las cifras de ingresados no son alarmantes, aunque la tendencia de las últimas jornadas es de claro ascenso.
Y el pronóstico para esta sexta ola no mejora con los últimos datos de contagiados. Ayer fueron 925, la mayoría en la provincia de Zaragoza, que sumó 667 positivos. También se notificaron 177 en Huesca, donde Jaca sigue siendo el principal foco de contagio; y 59 en la de Teruel.
En la capital aragonesa, las zonas más afectadas fueron Sagasta-Ruiseñores, con 31 positivos; San José Sur, con 28; y Delicias Sur, con 26. También se produjo un nuevo fallecimiento a consecuencia del virus.
Todo ello mientras que la incidencia acumulada sigue ascendiendo y corre el riesgo de terminar igualando a los de los peores momentos de la pandemia. Actualmente, se encuentra en 683,5 casos por 100.000 habitantes y dibuja una línea claramente ascendente que, de momento, no parece que se vaya a revertir. Si sigue así, en unas pocas jornadas podría alcanzar el pico de la cuarta ola, con 764,3 contagios. Más complicado es que se vuelva a repetir la curva de la tercera, que superó los 1.100 casos por 100.000 habitantes a 14 días.
La incidencia a 7 días, otro de los indicadores que manejan las autoridades sanitarias, es algo más preocupante. Con 413 positivos supera ya todos los picos epidémicos, a excepción del provocado por los ‘no pilares’, que se situó en 587,6.
Una de las diferencias de la situación actual fue el brusco ascenso de los contagios entre la población de 20 a 24 años, que en solo dos semanas pasó de tener una incidencia a siete días de 96 casos por 100.000 habitantes a superar los 1.888, el mayor pico registrado nunca en un grupo concreto de edad. Este punto álgido se produjo hace una semana y desde entonces la curva está en retroceso. Ayer eran 1.663. Una evolución similar, aunque con cierto decalaje, se produce entre los 15 y 19 años, con 1.366, y de 25 a 29, con 1.074. Ambas se encuentran desde hace dos jornadas en remisión.
Suben los casos en los mayores
El resto de grupos de edad continúan, en términos generales, en ascenso y, actualmente, los de 70 a 74 años son los que registran unos datos más favorables, con 85,3 casos por 100.00 habitantes, aunque la tendencia que mantiene es al alza.
Tal es el impacto que se está registrando en estas edades que el semáforo covid del Ministerio de Sanidad ya situó en riesgo alto la incidencia acumulada a siete días entre la población mayor de 65 años. Se trata, junto a Navarra, Asturias y Cantabria, de una de las pocas autonomías con estos indicadores. También destacan, en riesgo extremo, Cataluña y Castilla y León.
Por provincias, Huesca y Teruel se encontrarían en este riesgo extremo, mientras que Zaragoza sería la única aragonesa que, en cuanto a la afectación en la población más vulnerable, todavía estaría en alto.
