Los billetes baratos de Avlo y Ouigo para el verano vuelan a alta velocidad
El reclamo ‘low cost’ se desdibuja ante la gran demanda: es complicado encontrar un viaje Tarragona-Zaragoza en Avlo o Ouigo un domingo por menos de 35 euros.
Se esperaban como agua de mayo y, salvo contadas excepciones, no está siendo la panacea deseada. La alta demanda (y las muchas ganas de pisar la playa) hace que en la alta velocidad barata, tanto Ouigo como Avlo -que comenzará sus expediciones dentro de trece días- ya no sea posible encontrar billetes de oferta a 9 o 15 euros en los fines de semana de verano.
El trayecto de Delicias hasta la estación de Camp de Tarragona, lo más cerca posible de la Costa Dorada, llega a costar hasta 59 euros el domingo 15 de agosto en Avlo cuando apenas es una hora de recorrido. Peor es lo del viaje inicial de esta nueva operadora filial de Renfe para el próximo día 23 de junio: para entonces solo quedan billetes a 89 euros.
En ambas compañías los servicios más demandados durante el verano son los últimos de cada domingo y es cierto que en fechas no tan señaladas los costes bajan muchísimo. Cuando se despliega la ventana de los días estivales de Ouigo aún abundan los billetes a 15 y 19 euros para trayectos que se den en días laborables. Avlo es un poquito más caro -varían también los servicios- pero aún es posible encontrar en el trayecto entre Zaragoza y Tarragona billetes en julio y agosto a 35 euros. Hay que irse hasta la pestaña de septiembre para volver a hallar billetes a 9 euros, que es con los que se promocionan, en las webs o aplicaciones de las dos compañías.
Las grandísimas ofertas del ‘low cost’, ideadas para captar público y darse a conocer tras 80 años de explotación ferroviaria en monopolio y sin competencia, han volado en pocos días. Las dos operadoras -una dependiente de Renfe y otra de la francesa SNCF- llevan semanas vendiendo cientos de plazas al precio mínimo para estimular la demanda, pero estas súperofertas han ido tocando a su fin y no está previsto que se repongan. Mientras que desde Avlo aseguran que su nuevo modelo de alta velocidad reduce el billete del AVE una media del 16%, en Ouigo dicen que ellos lo rebajan un 50%.
Estas afirmaciones pueden ser reales en el momento en el que se lanza la oferta, pero los ávidos internautas hacen que se conviertan en un acto de fe a las pocas horas. El coste de los billetes, como es natural, va aumentando conforme se llenan los trenes y hay que recordar que las paradas en Tarragona de la compañía francesa sólo se hacen en una de sus cinco expediciones diarias, lo que hace que la oferta escasee pronto. Además, Ouigo dejará de parar en Camp de Tarragona el próximo 3 de octubre porque este es un destino que de forma especial cubre solo en verano.
Fuentes de la compañía se muestran muy satisfechas con su primer mes en circulación -comenzaron el pasado 10 de mayo- y afirman que la ocupación media de sus trenes ha sido del 85%. La operadora ha transportado en un mes a más de 130.000 viajeros y presume de haber detectado una “elevada presencia de niños y menores de 14 años”, que es el segmento de población, el más familiar, al que aspiraba desde un comienzo. Ouigo insiste en que su propósito es “popularizar la alta velocidad y dar respuesta a un público que antes no usaba estos servicios por los precios”. Los menores de 14 años pueden viajar por 5 euros en sus trenes y la compañía trata así de “instar a que deje de usarse el coche o el autobús” en estos trayectos.
El balance de sus 300 viajes iniciales es “positivo”, dado que el periodo en que se ha estrenado estaba repleto de “incógnitas e incertidumbres”, explican. Por un lado, su desembarco hubo de retrasarse casi un año con motivo de la pandemia y, por otro, el estreno llegó justo el pasado 10 de mayo, al día siguiente de que decayera el estado de alarma. Esto podía asustar o azuzar al viajero y parece que ha sido lo segundo. La compañía francesa planea ahora extender la oferta que une Madrid y Barcelona vía Zaragoza con otros trayectos que conecten con Valencia y Alicante para finales de este mismo año y con Córdoba, Sevilla y Málaga ya entrado 2022.
El sector del transporte está ahora expectante con el desembarco de Avlo, que debutará el próximo día 23. Lo hará con cuatro salidas diarias por sentido y con más paradas que su rival francés. Una serie de sus vehículos (Avril) tiene incluso más capacidad que Ouigo y eso que es un tren de un solo piso. Otra diferencia es que no tiene servicio de cafetería (sólo máquinas de vending) y que el usuario tendrá que mirar con lupa los extras que contrata porque -como sucede con las aerolíneas baratas- hay sobrecostes por equipaje adicional o por seleccionar el asiento. Ojo, que la broma puede salir cara si alguien se presenta con una maleta no incluida en el momento de hacer la reserva: la penalización es de 30 euros, con lo que por muy barato que salga el billete se puede hacer, como dice el refrán, un pan con unas tortas. Otra diferencia de servicio es el wifi, que en la filial barata de Renfe es gratuito “temporalmente” y en Ouigo cuesta 3 euros.
En las primeras ofertas de Avlo se llegaron a comercializar billetes por 5 euros (vía códigos promocionales) pero ya no quedan ni rastro de aquellas gangas. No sería de extrañar que Avlo implementara nuevas ofertas de precios muy competitivos en un futuro, pero ya en fechas ajenas al verano: de momento, la oferta que puede verse en su web sólo llega hasta mediados de diciembre.
Habrá que ver qué sucede entonces y cómo unos y otros trenes van asumiendo la demanda porque la liberalización del ferrocarril vivirá un nuevo episodio ya entrado 2022 cuando comiencen a ofrecer sus servicios de alta velocidad el consorcio Ilsa, impulsado por Air Nostrum junto a Trenitalia.
