patrimonio

Comienza la restauración de la portada norte de la iglesia románica de El Salvador, en Ejea de Los Caballeros

Los trabajos, cuyo plazo de ejecución es de 6 meses, se prolongarán hasta principios del mes de noviembre.

Portada norte de la Iglesia de San Salvador, en Ejea de los Caballeros.
Portada norte de la Iglesia de San Salvador, en Ejea de los Caballeros.
DGA

La portada norte de la iglesia de El Salvador de Ejea de los Caballeros (Zaragoza), un templo de estilo románico tardío declarado Bien de Interés Cultural, lucirá a final de año completamente restaurada y con un nuevo elemento de protección en vidrio que permitirá su contemplación integral al tiempo que la conserva.

Los trabajos comenzarán en las próximas semanas y tienen un plazo de ejecución de seis meses y un presupuesto de 180.000 euros, de los que una parte se destinará a la restauración de la portada propiamente dicha y la otra parte irá destinada a la instalación de una protección.

La intervención, impulsada por la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, consistirá en la limpieza, consolidación y fijación tanto de la piedra como de los morteros y las policromías que componen la portada, para lo que será necesaria una importante labor de documentación, estudios de materiales y un plan de mantenimiento y conservación preventiva para el futuro, informa el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.

iglesia de El Salvador de Ejea de los Caballeros
iglesia de El Salvador de Ejea de los Caballeros
Turismo Ejea de los Caballeros

La protección, mediante una estructura ligera realizada en vidrio con finos perfiles metálicos y un tejadillo de zinc, respetará plenamente los valores históricos, estéticos y simbólicos de la portada, así como su funcionalidad e incorporará un cuidado sistema de iluminación y un eficaz sistema anti aves.

Declarado Monumento histórico-artístico en 1931, el templo fue construido entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII en estilo románico tardío con algunos elementos góticos y renacentistas.

Es un edificio realizado en sillería de piedra arenisca de excelente talla, que presenta nave única de cuatro tramos con capillas laterales y ábside poligonal. La transición al gótico se observa en la bóveda central, de cañón muy apuntado, y en la bóveda nervada del ábside.

Las capillas laterales abiertas entre los contrafuertes, y que son fruto de una ampliación del siglo XV, se cubren con bóvedas de distintos tipos. Al exterior, el templo muestra un aspecto fortificado debido al remate almenado de la nave y a la tipología del torreón noroccidental con matacanes y garitones.

Sus dos portadas lucen figuraciones esculpidas de estilo románico y atribuidas tradicionalmente al "Maestro de Agüero" o "Maestro de San Juan de la Peña".

La occidental aparece flanqueada por dos torres mientras que la septentrional, anteriormente cobijada por un pórtico hoy desaparecido, se abre por medio de cinco arquivoltas que relatan la vida de Cristo y culminan con la representación de la Última Cena en el tímpano central y que todavía conserva restos de su policromía original. 

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