El sábado 13 de marzo, especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Zaragoza observaron como un vehículo circulaba a escasa velocidad por un camino paralelo a la A-2, en el término municipal de La Muela. Según informan desde la Guardia Civil, los agentes verificaron instantes después como la persona que viajaba en el asiento del acompañante bajaba la ventanilla, sacaba una escopeta y efectuaba dos disparos en dirección a los campos situados en la margen derecha del camino, tras lo que que descendieron del vehículo y recogieron un conejo que habían abatido.

Ante estos hechos los especialistas del Seprona interceptaron el turismo e identificaron a sus ocupantes, localizando en el maletero un saco con 13 conejos muertos.

En la entrevista realizada al propietario de la escopeta, éste aportó la documentación relativa a la tenencia del arma, así como una autorización de día para la caza de conejo en madriguera con hurón y arma de fuego o red en el coto. Al serle solicitada la licencia de caza en vigor que le habilitase para la realización del deporte cingético, manifestó que carecía de ella. 

Por todo ello los especialistas del Seprona intervinieron el arma y las piezas abatidas, procediendo a su denuncia por disparar de un vehículo en zona de seguridad y cazar careciendo de licencia de caza en vigor.

De las infracciones observadas se dio cuenta al Servicio Provincial de Ganadería y Medio Ambiente de Zaragoza. El arma fue depositada en la intervención de Armas de la Guardia Civil y lo animales abatidos fueron gestionados conforme a la normativa de caza de Aragón.