El Gobierno impulsa, al fin, la variante de Borja y Maleján, que lleva paralizada más de trece años

El Ministerio de Fomento adjudicó en 2008 el proyecto de construcción de la variante entre Borja y Maleján en la N-122 por 803.493 €. Más de trece años después, se retoma el proyecto con la resolución emitida por la dirección calidad de Evaluación Ambiental sobre la variante, que no se tendrá que someter al procedimiento de evaluación ambiental ordinaria.

 En la resolución, que el Ministerio de Transición Ecológica reitera a través del Boletín Oficial del Estado, su apuesta por que la variante sea un ramal de 7,4 kilómetros con tres enlaces de nueva construcción, un túnel que discurre bajo el Cerro de las Bodegas de 719 metros y un tramo de 162 metros de falso túnel. Esta variante rodea el polígono industrial Barbalanca y el núcleo urbano de Borja por el norte. 

Mientras el proyecto está bloqueado, un intenso tráfico circula por el casco urbano de  Borja, incluidos camiones que se dirigen a Portugal, y que tienen que parar en un stop en medio del pueblo

Respecto al potencial impacto ambiental del proyecto, se solicita la instalación de una pantalla acústica de dos metros de altura pen el tramo próximo al Hotel Portal del Moncayo. También se insta a incorporar, en el proyecto de construcción, un estudio adecuado de aprovechamiento de materiales, para maximizar la composición de tierras. 

En el tramo de ejecución del túnel bajo el cerro de las Bodegas , sondeos geológicos realizados concluyen que no existen acuíferos importantes que puedan verse afectados. Tampoco se contemplan efectos sobre la flora o la vegetación ni el paisaje. 

Concluye, por tanto, la dirección general de Evaluación Ambiental que, de acuerdo con la evaluación ambiental ordinaria, no se prevén efectos adversos significativos sobre el medio ambiente, siempre y cuando se cumplan las medidas establecidas en el documento ambiental.