Regulación autonómica
La DGA blinda la seguridad en el turismo activo con pólizas de accidente de 6.000 €
Publica un decreto "pionero" que obliga a los guías a estar geolocalizados y disponer de comunicación con los servicios de rescate. La norma también pretende aligerar trámites a las empresas y combatir el instrusismo
El Gobierno de Aragón pretende incrementar la seguridad en la práctica del turismo activo, para lo que acaba de publicar un nuevo decreto que obliga a las empresas a tener un seguro de accidente y asistencia por una cuantía mínima de 6.000 euros y a disponer de un plan de emergencia, al margen de que los guías e instructores porten un dispositivo de geolocalización y otro de comunicación para mantener contacto directo con su empresas y los servicios de rescate. Igualmente, deberán llevar siempre un botiquín de primeros auxilios.
Estas son las principales novedades de la nueva normativa consensuada con el sector y los especialistas en rescate que viene a sustituir a la vigente desde 2008, con la que se pretende, además, lograr la tan reclamada simplificación administrativa, reducir "cargas" a las empresas y combatir el intrusismo.
La directora general de Turismo, la aragonesista Elena Allué, ha destacado la importancia de garantizar la seguridad en una actividad que conlleva riesgo y supone un valor añadido para Aragón, que es "pionera" en su práctica y regulación y que ayuda a asentar población en el territorio. Así, ha apuntado que las 330 empresas inscritas en Aragón dan empleo a más de un millar de personas y generan un volumen de negocio directo de 12 millones al año, que se eleva a 45 con la actividad indirecta. "Todos los veranos hay accidentes y rescates y Aragón tiene que estar a la altura de las circunstancias", ha argumentado.
Allué ha asegurado que fijar una cobertura mínima de 6.000 euros permitirá cubrir los gastos de un eventual rescate, el traslado y la primera asistencia. Con el texto hasta ahora vigente no se fijaba el importe de la póliza. Igualmente no bastará con disponer de un protocolo de seguridad, sino que hará falta un detallado plan de seguridad cuya metodología de elaboración se aprobará en otra orden.
La regulación también afecta a los guías e instructores, que en el caso de ser menores a partir de 16 años deberán estar acompañados por un compañero con mayoría de edad. En cuanto a certificaciones de profesionalidad, el decreto menciona expresamente los títulos y cualificaciones requeridos para cada tipo de actividad.
Al mismo tiempo, la DGA también pretende "aligerar cargas y trámites" a las empresas, para lo que ahora podrán ejercer con una declaración responsable, sin tener que esperar a una autorización administrativa previa. Igualmente, se elimina la obligatoriedad de tener cubierta de forma ilimitada la responsabilidad civil por daños personales para las empresas que necesiten desplazamientos por carretera. «Era incompatible con la realidad de los seguros disponibles en el mercado», ha detallado.
También se les exige que el número de signatura figure en todas sus actividades y promociones para luchar contra el intrusismo. Con el mismo fin, las empresas no podrán ejercer la actividad sin un informe favorable de la Administración en todo lo concerniente a la seguridad y a los requisitos de los guías e instructores. Este requisito regirá también para las compañías nacionales y europeas que pretendan operar en Aragón. En el caso de las internacionales, además, deberán comunicar con antelación el desarrollo de la actividad.
