Iñaki Gabilondo, Miguel Poveda y otros muchos famosos que hicieron la mili en Aragón

El Dúo Dinámico descubrió las mieles del triunfo mientras servía en la Base, Paco Buyo jugó cedido en el Huesca cuando era un recluta y José Mota conoció a Juan Muñoz (Cruz y Raya) en 1985 en los campos de maniobras.

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Imagen del último reemplazo que se dio en Zaragoza hace veinte años.
Guillermo Mestre

Quizá a los ‘millennials’ les parezca algo increíble, pero hasta hace veinte años -veinte años exactos- existía algo llamado servicio militar obligatorio. El Ejército no todavía profesional y todos los años unos 3.000 mozos aragoneses estaban pendientes de que un bombo decidiera el destino en el que se formarían militarmente durante nueve meses. Aragón, con la potencia de la Academia General Militar en Zaragoza, el tirón de los puestos de montaña del Pirineo y el campo de tiro de aviación de Caudé, fue un destino común para miles de reclutas españoles, que a sus tiernos 17 o 18 años salían por primera vez del hogar y recalaban en la Comunidad para vivir esta singular aventura. Aunque muchos detestaran los barracones y las guardias, también fue nutrida la nómina jóvenes que se enamoraron de Aragón y sus gentes y que, con el tiempo, se hicieron famosos y recordaron algunas ‘batallitas’ de su mili aragonesa.

Si conocidas son las imágenes de Elvis partiendo al frente con su petate, en Zaragoza tenemos una estampa semejante con Ramón Arcusa y Ramón de la Calva haciendo las mil y una para poder promocionar su incipiente carrera musical mientras prestaban servicio en la Base Americana. El Dúo Dinámico empezó en Zaragoza pues la pareja se conoció cuando hacían las veces de soldados de aviación con acuartelamiento en Zaragoza. De la Calva suele contar que recaló en Zaragoza “como castigo” a finales de la década de 1950 tras dejar una fábrica militarizada. 

Ramón Arcusa y Manolo de la Calva, en sus primeros tiempos ligados a Zaragoza.
Ramón Arcusa y Manolo de la Calva, en sus primeros tiempos ligados a Zaragoza.
Heraldo

A orillas del Ebro tendría que haber pasado cinco años, pero eso hubiera truncado las aspiraciones artísticas de cualquiera. Ambos, ya con sus jerséis de cuello abierto y camisas blancas debajo, idearon un sutil treta para poder mover sus primeros EP. “Solíamos ir con la guitarra a cantar a las radios. Cuando nos llamaban de Radio Nacional del España, de la emisora de Barcelona, pedíamos permiso al capitán de la Base que, obviamente, nos lo negaba porque estábamos en la mili, no en la farándula. Entonces llamábamos a Barcelona, decíamos que no teníamos autorización pero que quizá a través del Ministerio lo pudiéramos conseguir. Al cabo de unos días, nos llamaba el capitán de la Base y casi nos ordenaba que fuéramos a Barcelona a cumplir la orden del Ministerio”, contaba el cantante al crítico de este diario, Matías Uribe, en una entrevista. Muchos de sus seguidores zaragozanos, los que ya peinan canas, recuerdan que el Dúo Dinámico animaba cantando las mañanas de domingo en colegios como el La Salle de Gran Vía, cuando aún no se intuía la fama que llegarían a alcanzar.

Muchos incipiente futbolistas recalaban en
el Real Zaragoza cedidos de su club de origen
para que no pasaran un año en blanco

Cantantes, actores, numerosos futbolistas y, también, periodistas tuvieron en su día que incorporarse a filas en tierras zaragozanas. Sabido es que durante unos años la plana mayor del ‘Hoy por hoy’ de Iñaki Gabilondo bromeaba con que si no habías hecho la mili en Zaragoza no podías formar parte del equipo: hasta cinco de sus colaboradores habituales habían recalado en la ciudad. A orillas del Ebro se instruyó el propio Gabilondo -como recordaba el periodistas en sus visitas- y también Luis del Val, que estuvo destinado en Transmisiones en el Cuartel de San Lamberto. Él mismo recuerda que, primero, trabajó como telefonista en la jefatura del Mando Aéreo (entonces en la plaza de los Sitios) y que, si bien las mañanas eran movidas, por las tardes se permitía el lujo, incluso, de abandonar la centralita y subir a la terraza al tomar el sol. Cuando le pillaron, lo mandaron al cuartel de San Lamberto. Otro periodista de prestigio que hizo la mili en Zaragoza es Ramón Lobo, experto en conflictos internacionales, que aprovechó sus meses de instrucción, incluso, para colaborar en HERALDO. Asegura que el entonces subdirector de este diario, José María Doñate, fue quien despertó su vocación por la política internacional.

La lista de reclutas de adopción zaragozana es tan amplia como diversa. Figuran en ella el jinete Luis Astolfi, el economista José María Gay de Liébana, el entrenador de balonmano Valero Rivera o, incluso, Javier Herrero. ¿Quién? El rubio de los Pecos. ¿Más ejemplos? El actor Juanito Navarro, el locutor Fenandisco, Javier González Ferrari -como recordó en el pregón de fiestas del Pilar de 2000-, el Pastor de Andorra o el escritor Juan Eduardo Cirlot, que hizo el servicio militar en Zaragoza entre 1941 y 1943, y contactó con el círculo de Pilar Bayona, Pilar Aranda e incluso trabó amistad con los Buñuel.

La recreación del sorteo de mozos, en una exposición en Capitanía.
La recreación del sorteo de mozos, en una exposición en Capitanía.
Heraldo

Si se abre el melón de los futbolistas podría encontrarse material para aburrir. Hasta el punto que en el año 2000, cuando acabaron los reemplazos, se desató cierta preocupación porque se entendía que muchos jugadores habían iniciado su etapa en el Real Zaragoza por hallarse realizando el servicio militar en la capital. Futbolistas como Aguado, Alonso, Irazusta o el mismo Miguel Pardeza recalaron en el club con cesiones (con opciones de compra) de sus equipos de origen, con el objetivo de que no pasasen un año en blanco. Incluso Paco Buyo hizo la mili en Zaragoza el año que jugó para la SD Huesca. Otros rostros conocidos, al margen del deporte, que se desplazaran a la capital altoaragonesa serían los del presentador Jaime Bores o el cantaor Miguel Poveda.

Los citados ‘millennials’ también conocerán a José Mota, el humorista, que hizo la mili en Zaragoza en 1985 y fue aquí, a orillas del Ebro, donde conoció a su pareja artística en sus inicios, Juan Muñoz, con quien montó el dúo Cruz y Raya, que triunfaría a comienzos de los 90 en Televisión Española.

Y capítulo aparte merecerían los padres de personalidades conocidas que también hicieron la mili en Zaragoza como -sirva el botón de muestra- el progenitor de la cantante Amaia Montero, que lo recordó en uno de los primeros conciertos de La Oreja de Van Gogh en las fiestas del Pilar de 1998. También David Muñoz, vocalista de Estopa, ha aprovechado la visita a los escenarios del Ebro para rememorar que “nuestro padre hizo la mili en Zaragoza y desde pequeños oíamos las maravillas que contaba de la ciudad”. Maravillas comparadas con su barrio de Cornellá, se entiende.

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