Itainnova y Sarga desarrollan el proyecto europeo de inteligencia artificial y big data Policy Cloud:¿Qué vino triunfa en internet?

¿Cuánta producción voy a tener al año que viene? ¿Qué calidad tendrá mi vino? ¿Con qué precio se va a vender? ¿Hablan bien de mi vino, de mi bodega, de mi denominación de origen? ¿En qué mercado debería vender: Europa, China, EE. UU.? ¿Qué hace bien mi competencia que podría inspirarme? ¿Quién es mi cliente? ¿Qué vino triunfa en internet? ¿Qué variedad triunfa con los ‘millenials’? ¿Y con los ‘pandemians’?

Sarga e Itainnova están desarrollando una herramienta tecnológica de apoyo en la toma de decisiones que aplica tecnologías como el big data y la inteligencia artificial (IA) al sector del vino y quieren saber qué preguntas necesitan responder los profesionales de las bodegas y las denominaciones de origen para que realmente les resulte de utilidad.

"Usamos ‘machine learning’, análisis semántico, herramientas de captura de grandes volúmenes de datos…, pero lo importante no es la herramienta en sí –asegura Rafael del Hoyo, responsable del proyecto Policy Cloud en Itainnova–; la IA responde preguntas y tenemos que saber cuáles son esas preguntas que queremos que responda".

Para presentar esta herramienta a todos los actores de la cadena de valor del vino y rastrear sus necesidades se celebró el pasado martes un encuentro ‘online’ dirigido a viticultores, bodegas, cooperativas, comercializadores y distribuidores, así como a personas y entidades que participan en la formulación de políticas alrededor del sector del vino. "Os necesitamos para saber cuáles son vuestras necesidades y cómo podemos mejorar la herramienta", dijo Javier Sancho, jefe de proyectos en Sarga, que insistió en que "es una herramienta pensada para el usuario final y queremos que participe en su creación para mejorar su usabilidad y diseño".

Quince socios de diferentes países participan en este proyecto financiado con 5 millones de euros en el marco de H2020. Con él se quiere "adaptar la nube para la gestión de políticas basadas en datos y proporcionar herramientas analíticas y modelos reutilizables integrados, que hagan estudios de forma automática –explicó Sancho–, convirtiendo los datos sin procesar en conocimientos valiosos y prácticos para la formulación de políticas eficaces".

En Aragón, se ha elegido aplicarlo al vino por el peso del sector "y porque está muy organizado, dispone de mucha información y produce mucha interacción en redes sociales", una fuente de datos esencial hoy en día.

Por ahora, se han planteado tres casos de uso, con visualizaciones sobre un mapa que permiten conocer qué impacto va a tener un producto en cada país; gráficas que muestran cómo evoluciona la opinión y hasta quién habla bien o mal; "también hemos detectado que interesa mucho saber cuál es el precio de mi vino"; y por último, las tendencias del mercado, a partir de paneles de las palabras más comentadas. La idea es poder filtrarlo por denominación de origen, bodega y marca.

"En esta agricultura 4.0, lo primero es capturar datos con calidad, porque para tomar buenas decisiones, lo primero es tener buenos datos", resaltó Del Hoyo, quien señaló que "podemos integrar datos de muchas fuentes, generar indicadores, analizar con herramientas de análisis semántico si hablan bien o mal y aplicar predicción y clasificación a futuras campañas".

Cuatro casos piloto que se apoyan en la Iniciativa Europea de la Nube

Policy Cloud es un proyecto europeo pionero al utilizar la infraestructura de nube europea para las Administraciones públicas. En el marco del programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea, el proyecto se propone ofrecer un entorno integrado único que aborde el ciclo de vida completo de la gestión de políticas. Para ello, utilizará las capacidades que ofrece la Iniciativa Europea de la Nube, especialmente en relación con el análisis de datos, para facilitar la formulación de políticas basadas en pruebas.

Se cumple ahora un año de su lanzamiento. En aquel momento, el coordinador del proyecto, Ricard Munné, de Atos Spain, comentaba que "la combinación de experiencia técnica y casos piloto demostrará cómo se pueden aprovechar las nuevas tecnologías para la formulación de políticas fiables y basadas en datos".

Concretamente, Policy Cloud cuenta con cuatro casos piloto, que cubren temas complejos en diferentes campos que servirán como demostradores para la gestión de políticas basadas en datos y metodologías de apalancamiento para la participación de los usuarios de los ciudadanos y las comunidades. Los resultados se evaluarán en diferentes entornos, demostrando la aplicabilidad y reutilización de los modelos y herramientas desarrollados en diferentes países, contextos y sectores.

RADICALIZACIÓN El primer caso de uso se centrará en recopilar y analizar datos de las redes sociales y los tablones de anuncios, a fin de proporcionar a los responsables de la formulación de políticas herramientas eficaces basadas en datos para abordar el problema de la radicalización.
AGROALIMENTACIÓN El segundo caso de uso es el que se desarrolla en Aragón y explotará la plataforma Policy Cloud como una herramienta de apoyo para facilitar la toma de decisiones por parte de los diversos actores de la cadena de valor agroalimentaria en nuestra Comunidad.
ENTORNOS URBANOS En Sofía se ubica el tercer caso de uso, que mejora los entornos urbanos y el monitoreo a través del análisis de datos de ‘crowdsourcing’, específicamente a través de un mapa interactivo de la ciudad en el que los ciudadanos pueden señalar problemas a la Administración en tiempo real.
DESEMPLEO El caso de uso cuatro se basará en el trabajo iniciado en Londres sobre el análisis predictivo hacia la identificación de riesgos de desempleo y la formulación de políticas.

Una de las innovaciones clave es el Policy Development Toolkit y, en particular, "la forma en que se ejecutarán diferentes análisis en diferentes conjuntos de datos, lo que significa que los análisis se proporcionarán como un servicio". Esto permitirá a los responsables políticos recopilar información y compilar políticas sin tener que entrar en detalles técnicos. Además, se trabajará con la garantía de que los servicios y productos desarrollados cumplan con la regulación legal en materia de protección de datos, privacidad y ciberseguridad.

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