VIVIENDA

La DGA achaca a la burocracia el fracaso de las ayudas de alquiler por la covid

El PP critica que solo se hayan atendido 390 de las 1.836 solicitudes y destinado un 20% de los 3,8 millones.
El consejero de Vertebración admite que se "enrona" a las familias con la documentación exigida.

La mayoría de solicitudes de las ayudas de alquiler corresponden a la provincia de Zaragoza.
La mayoría de solicitudes de las ayudas de alquiler corresponden a la provincia de Zaragoza.
José Miguel Marco

El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, ha admitido este viernes el fracaso de la convocatoria de las ayudas de alquiler dirigidas a familias en situación de vulnerabilidad económica por la crisis sanitaria, que ha achacado a la burocracia. Desde que se convocaron el pasado verano, y pese a las sucesivas ampliaciones de plazo, solo se han llegado a registrar 1.836 solicitudes y un tercio se han tenido que rechazar porque no cumplían requisitos o no reunían toda la documentación necesaria para optar.

Soro no ha tenido reparos en asumir "toda la responsabilidad" ante el diputado del PP Joaquín Juste, quien le ha preguntado por esta cuestión en la sesión de control al Ejecutivo, en la que ha criticado que solo se haya destinado un 20% de la partida disponible, de 3,8 millones, y solo se hayan atendido 390 de las 1.836 solicitudes. "Otras autonomías han incrementado la partida. ¿De quién es el fracaso, de Pedro Sánchez y Podemos que han establecido el Plan de Vivienda o de ustedes? Le voy a decir de quién no es la culpa, de las 1.800 familias que esperan las ayudas", le ha espetado en el pleno de las Cortes.

El consejero de Vertebración ha evidenciado que "algo falla" y ha mostrado su disposición a hacer autocrítica, a reconocer el error y a buscar las causas. A renglón seguido, ha achacado la situación a los requisitos impuestos por una orden ministerial que no se pudieron adaptar a la realidad aragonesa, que obliga a "enronar" a los solicitantes a la hora de exigir documentación. "Si no se presenta, no se tiene derecho a percibir la ayuda y muchísimas de las solicitudes hay que subsanarlas", ha añadido.

La Dirección General de Vivienda contaba con 3,8 millones de financiación estatal y previó una partida adicional propia de 2,6 para atender la hipotética demanda esperada, pero la realidad fue muy distinta y el dinero de Madrid fue más que suficiente. "Recibimos muchas menos de las que esperábamos", ha dicho.

El consejero de Vertebración ha aseverado que el verdadero problema es para las personas que no pueden optar a estas ayudas de alquiler, pero de forma colateral también para la propia Administración. "¿Sabe la carga de trabajo que supone comprobar que cada solicitante cumple todos los requisitos y que las mismas personas deben tramitar a la vez 3.661 expedientes de ayudas de alquiler general y otros 1.200 de la línea de jóvenes?", ha argumentado.

Soro ha lamentado que no haya funcionado toda la labor de publicidad, con un teléfono y hasta diez puntos de atención. "Por eso, nos estamos replanteando futuras convocatorias y la ley de simplificación administrativa que aprobamos el jueves puede resultar clave. Esto no puede volver a pasarnos en el futuro", ha concluido.

Por su parte, Joaquín Juste ha lamentado que con la grave situación económica y casi 2.000 familias con severas dificultades económicas no se les acabe ayudando desde la Administración pese a disponer de partida presupuestaria. "Ni lo entiendo yo ni nadie fuera de aquí que no les podamos ayudar", ha apuntado.

Juste ha tirado de hemeroteca y ha recordado a Soro que cuando la convocatoria se lanzó el pasado verano manifestó que la tramitación iba a ser "muy rápida" para que las ayudas llegarán pronto a las familias, e incluso que el dinero iba a ser insuficiente. "Eso decía usted, que haría falta incorporar más dinero y que Aragón sería una de las comunidades que más esfuerzo haría", ha lamentado.

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