La venta online de mascarillas salva el año de Moda Tena, con sede en Sariñena

Con cien años de historia a sus espaldas, a principios de 2020 la tienda de Moda Tena en Sariñena bajaba la persiana para siempre. Pero solo en su establecimiento físico. El negocio, con Rafael Tena al frente, nieto del fundador, continúa más activo que nunca, centrado ahora en la venta online.

Esta difícil decisión, la de cerrar la tienda física definitivamente para centrar todos sus recursos a la tienda en internet, se tomó en enero. No tuvo nada que ver con la covid pero cuando, en marzo, todo estalló, Rafa casi suspiró aliviado. Aun así, gran parte de su facturación proviene de la elaboración y venta de pañuelos y otros complementos para fiestas populares. Unos eventos que el pasado verano fueron prácticamente inexistentes, por lo que las ventas en este sentido cayeron un 90%.

Unas pérdidas que, afortunadamente, se han visto compensadas por la venta masiva de mascarillas a través de modatena.com. Y es que en cuanto la pandemia fue tomando forma, Rafa y su equipo no dudaron en meterse de lleno en este sector. Compraron máquinas para confeccionarlas, que esperan poder utilizar cuando la situación se normalice en la creación de otros artículos de tela que ya tenían en catálogo.

Gracias a esta proactividad, no solo han salvado el año, sino que lo han cerrado con más ingresos que los anteriores, solo con la tienda online. “Esta pandemia nos ha hecho espabilar a todos. Hay que buscar alternativas porque si no, se te comen” asegura Rafa, que se define como un comerciante de los de toda la vida adaptándose a las nuevas realidades.

Primero lo hizo apostando al cien por cien por la venta online y, después, diversificando su negocio hacia donde estaba la demanda. Y no solo con las mascarillas, también con la ropa de cama de tamaños especiales o con la de autocaravana, dos líneas en la que se centra actualmente su catálogo.

Una empresa familiar donde la polivalencia es fundamental

Aunque Moda Tena ha cambiado desde que el abuelo la fundara hace cien años, la empresa sigue siendo familiar. La mujer de Rafa forma parte del equipo y pronto lo hará su hija, que está terminando sus estudios superiores de Márquetin.

El equipo lo forman actualmente siete personas en una nave del polígono industrial de Sariñena y otra empleada que teletrabaja desde Zaragoza. Y es que para Rafa, el principal problema para sacar adelante su negocio en el medio rural es la dificultad de encontrar gente cualificada para incorporar a su plantilla que quiera mudarse al pueblo.

Consciente de que esto supone cierta desventaja, sigue valorando más su calidad de vida en Sariñena y no se plantea mover su fábrica a otro lugar. Además, el salto al mundo online le ha permitido dejar atrás el gran inconveniente que tenía con la tienda física: la limitación en número de clientes potenciales.

“Con internet no hay barreras. Estamos abiertos al mundo y el cliente potencial es todo el que tú quieras. Podemos llegar mucho más lejos si le ponemos empeño”, asegura. Y en ello está, con el apoyo incondicional de su equipo polivalente que tan pronto hace paquetes como actualiza la página web con nuevos productos.

Un esfuerzo común que ha hecho posible superar en pedidos los años anteriores y mantener prácticamente intacta la plantilla, que solo tuvo que estar en ERTE durante un mes y medio.

Pero para llegar hasta aquí, desde los 18 años, cuando se incorporó a la empresa familiar, Rafa ha ido aprendiendo y evolucionando con los tiempos. “Me viene de familia, en mi casa el esfuerzo, el trabajo y el aprendizaje siempre han estado presentes”, indica.

Este carácter proactivo le ha permitido ir transformando su tienda y modelo de negocio para adaptarse. Así, el primer gran paso lo dio en 2005, cuando comenzó a vender también por internet sus productos publicitarios y de fiesta y eventos a través de rafaeltena.com.

Su cliente en este caso eran otras empresas, que también podían acceder a su catálogo a través de la tienda física, situada justo debajo de su casa, en Sariñena. Durante años se fueron compaginando ambos canales de venta y en 2014 se lanzó también al mundo online con modatena.com, para la venta al consumidor final de ropa de cama y hogar, principalmente.

Con los años, la tienda online fue cogiendo forma y creciendo en cifras, lo que llevó a Rafa a tomar una de las decisiones más difíciles de su vida, cerrar definitivamente el establecimiento físico. “Los primeros meses fueron difíciles, lo echábamos de menos”, confiesa. Además, por aquel entonces, la tienda física facturaba más que la online.

Ahora, con 2020 ya clausurado, todas las dudas iniciales se han disipado. La tienda, pese a tratarse de uno de los años más complicados de su historia, ha superado con creces las expectativas.

Y eso que, según su experiencia, Rafa da fe de que mantener un pequeño negocio en el medio rural cuesta tres veces más que en la ciudad. “Nos tenemos que esforzar el triple, aunque en otros aspectos tengamos ventajas”, reconoce.

Internet, el aliado número uno de las poblaciones pequeñas

Pese a los impedimentos en cuanto a encontrar profesionales cualificados de perfiles muy concretos que quieran trabajar en Sariñena o desplazarse hasta allí todos los días, Rafa defiende que internet es el aliado número uno para los negocios en las poblaciones pequeñas.

Al menos para un negocio como el suyo, donde el 80% de sus productos son de fabricación propia, y situado en una localización propicia para que la logística permita realizar envíos en 24 ó 48 horas a toda la península.

Y es que cuando se trata de internet, como el propio Rafa indica, “no hay excusas”. Ni excusas ni limitaciones de tiempo o espacio. Desde su Sariñena natal, los productos de Moda Tena llegan a donde el cliente lo necesite.