Agroalimentación
Las cinco plantas de Vall Companys en Aragón crecen en facturación y empleo
Su volumen de negocio suma 651 millones y aglutinan a 2.008 trabajadores.
Las cifras del grupo alimentario Vall Companys crecen en Aragón. Sus cinco plantas –dos en Calamocha (Jamcal y CLC), dos en Ejea (Cárnicas Cinco Villas y VC Ejea) y una con modernas instalaciones en Mercazaragoza (ICP)– cerraron el ejercicio de 2019 con una facturación de 651 millones de euros frente a los 500 millones en los que se situó su volumen de negocio el año precedente.
Han aumentado sus ventas y lo han hecho sus plantillas. El empleo creado en las industrias aragonesas ha elevado la plantilla de Vall Companys en la Comunidad en un 7,6% al pasar de los 1.868 trabajadores que empleaba en 2018 a los 2.008 con los que cerró el pasado año.
Así lo recogen las cuentas anuales de la compañía catalana, que selló 2019 con "unas ventas históricas", señaló el grupo, que alcanzó una facturación de 2.054 millones de euros, lo que supone un incremento del 13% respecto al ejercicio anterior, en el que sumó 1.775 millones de euros. Unos resultados que el grupo con sede central en Lérida explica por la fortaleza de porcino «que de forma coyuntural alcanzó en la lonja una cotización media de 1.4 euros el kilo» y el «ligero crecimiento» de otras unidades de negocio, como el avícola, el cerdo ibérico, la harinera y la producción de piensos.
A este crecimiento contribuyó el buen comportamiento de los mercados internacionales, que representan el 35% de las ventas y que en 2019, antes del escenario marcado por la pandemia, se incrementaron en un 15% gracias a especialmente a la destacada demanda de China, cuya producción –y la de su área de influencia– se vio gravemente afectada por la peste porcina.
Y así, el crecimiento de todas las áreas de negocio del grupo, que está formado por 43 compañías repartidas por todo el territorio español, han permitido cerrar el ejercicio con unos beneficios de 51 millones de euros, señalan desde la empresa.
Apuesta aragonesa
La apuesta de Vall Companys por Aragón no solo se traduce en ventas y plantilla. El grupo invirtió el pasado año 82,4 millones de euros, de los que el 22,7%, es decir, un total de 18,7 millones tuvieron como destino las cinco empresas con sede en Aragón, donde el grupo justifica su fuerte implantación «por la importancia, la calidad, y el desarrollo que tiene el sector primario en la región», dice la firma.
Así, Cárnicas Cinco Villas, que exporta el 51,1% de su producción y que consiguió en 2018 la certificación para el sacrificio y despiece de cerdo ecológico incrementó durante el pasado año un 53,69% la producción de este tipo de carne. Pero esta acreditación no es excepción única de la planta de Ejea. La compañía dedicada a tripería con sede en Mercazaragoza, International Casing Products (ICP),cuenta también con ella para comercializar tripa ecológica.
La apuesta del grupo también se ha dejado notar en Jamcal, donde el grupo espera alcanzar este año una producción de unas 80.000 piezas de jamón con Denominación de Origen Teruel. Unas cifras que representan el 27% de la producción total de secado de D. O.
Y a todo ello se suma una inversión de 27 millones de euros en la localidad oscense de Monzón, donde Vall Companys y el grupo belga Veos –a través de la puesta en marcha de Veos Ibérica– impulsan un proyecto de innovación y de economía circular para el desarrollo de proteínas funcionales para alimentación animal mediante el aprovechamiento y procesado de plasma de porcino.
Está previsto que las futuras instalaciones de Veos Ibérica, que estarán situadas en el polígono industrial La Armentera de la localidad del Cinca Medio, estén en funcionamiento en un año y medio aproximadamente. Su puesta en marcha, según recuerda el grupo alimentario catalán, generará 20 empleos directos cualificados y otros 30 puestos de trabajo indirecto.
