Clases en un solar ante el retraso en la construcción del colegio María Zambrano

Ni la niebla ni el frío han impedido que alrededor del 90% de las familias del colegio María Zambrano, ubicado en el barrio de Parque Venecia, hayan secundado este miércoles la huelga convocada por la ampa Claros del Bosque con motivo del retraso en la licitación y construcción del centro educativo. "Las obras debían de haber empezado a mediados de 2019 y este año tendríamos que tener ya un colegio", ha explicado Noemí Corbatón, presidenta de la citada ampa.

Los retrasos previos, unidos a la pandemia de la covid-19 que paralizó la burocracia, han provocado que este año los cerca de 200 menores matriculados no tuvieran todavía un colegio al que ir. Están divididos entre los barracones, instalados en una explanada, y el colegio Parque Venecia. Dadas las fechas, la previsión es que tampoco esté para el inicio del próximo curso escolar. Y para entonces las familias ya prevén que el colegio cuente con 300 alumnos: cuatro vías en cada uno de los tres cursos de infantil. "Cuando quieran hacer el edificio de prescolar, ya se habrá quedado pequeño y será necesario el de primaria", ha explicado Carolina Gracia, madre afectada que este miércoles se ha trasladado a la protesta.

Hasta el solar donde está prevista la construcción de este nuevo centro educativo se han desplazado casi el total de familias afectadas. "Con el esfuerzo que eso supone para los padres. Muchos han tenido que pedir un día de asuntos propios o de vacaciones. Hay autónomos que han tenido que desatender sus negocios", ha recordado Corbatón. Con mesas, sillas y hasta pizarras han escenificado lo que deberían ser sus aulas. "No están teniendo los mismos derechos que otros alumnos. No tienen aulas de psicomotricidad ni tampoco comedor, por centrarnos en lo básico", ha criticado Gracia.

David Gracia, padre de Olivia, ha lamentado que su hija tenga que ir cada día desde los barracones hasta el colegio Parque Venecia a comer. Además, ha detallado, la falta de material que tienen en estas aulas prefabricadas. "Contamos con los medios justos, pero no los necesarios", ha puntualizado Diego Vela, cuya hija va a 2º de infantil. Ha puesto como ejemplo la falta de perchas en la sala de profesores del Parque Venecia, que ha sido ocupada por un aula del María Zambrano. "Los niños no tenían donde colgar las chaquetas o abrigos y tardamos semanas el conseguir el visto bueno para poner las perchas", ha criticado.

Aida Sánchez, madre de Marc, ha explicado que los niños que utilizan el servicio de madrugadores, llegan al barracón con el aula fría, "al calentarse con gasoil". Ha reconocido que se ha intentando que los espacios acondicionados sean lo mejor posible, pero "no es un colegio". Todos han coincidido en señalar el esfuerzo llevado a cabo por el equipo directivo y el profesorado. "Los niños están contentos en clase", han puntualizado. Han criticado la falta de previsión del Departamento de Educación: "Es una zona nueva y siguen construyendo pisos a los que viene gente joven a vivir, pero no hay colegios".

La previsión del ampa, que recibió este miércoles una llamada del Departamento de Educación para citarles a una reunión la próxima semana, es solicitar la licitación tanto del edificio de infantil como el de primaria, ya que cuando se terminen de construir, ya serán necesarios ambos. "El centro se planificó con tres clases por curso, pero ahora hay cuatro y con la pandemia los han tenido que dividido en cinco", ha explicado Corbatón. Desde la Consejería que dirige Felipe Faci han explicado que el proyecto ya está redactado y que la previsión es que, cuando se aprueben los presupuestos de 2021, se saque a licitación.

Otra representación de familias ha acudido al edificio Pignatelli, donde este miércoles se ha aprobado la licitación urgente de las siguientes fases de los colegios Parque Venecia, Soledad Puértolas y otro edificio para el Val de la Atalaya.