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La Fiscalía investiga una denuncia falsa de una presa de Zuera por abusos sexuales
El sindicato CSIF e Instituciones Penitenciarias apoyan al funcionario del centro al que ella acusó en las redes y varias webs de presos
La Fiscalía de Zaragoza abrió ayer una investigación sobre una supuesta denuncia falsa de una presa contra un funcionario de la prisión de Zuera por una agresión sexual, que se expandió en las redes sociales y webs relacionadas con presos. Una interna contó en las redes que un funcionario apodado ‘El guaperas’ o ‘El barón Dandi’ abusó de ella en la celda el pasado 31 de julio después de no aceptar comprarle un teléfono móvil de 500 euros.
El sindicato CSIF (Centro Sindical Independiente y de Funcionarios) denunció las acusaciones de la presa de Zuera publicadas en internet porque consideraron que eran falsas y podrían ser constitutivas de delitos de injurias y calumnias. El funcionario denunciado señaló el 6 de agosto a través del sindicato que la interna lo había acusado falsamente y que era «una invención de la mujer». Otros internos se mostraron dispuestos a testificar en apoyo al funcionario.
El CSIF remitió el caso a la secretaría general de Instituciones Penitenciarias y consiguieron que esta semana apoyaran al trabajador de la prisión de Zuera. De hecho, Instituciones Penitenciarias remitió esta semana un escrito a la Fiscalía de Zaragoza, junto al CSIF, para que abrieran las diligencias. Fuentes de la Fiscalía de Zaragoza confirmaron que se había aceptado la denuncia presentada por el sindicato e Instituciones Penitenciarias y que podría suponer un delito de calumnia e injuria porque se había hecho en las redes con publicidad.
Hasta el momento, la versión de la presa se hizo pública en el blog ‘Grup de soport a presxs de Lleida’ y se ha reproducido en otras webs relacionadas con presos. Pero por ahora no consta que se presentara una denuncia en la Policía o en los juzgados.
La interna Carmen Badía, que cumple una pena de 24 años de cárcel por extorsión y por el asesinato a una psicóloga en Barcelona ocurrido en 2004, fue trasladada de la prisión de Zuera. «Hemos conseguido que por primera vez la secretaría general de Instituciones Penitenciarias defienda a un trabajador tras unas acusaciones falsas», señaló Alfonso Peiró, delegado de prisiones de CSIF. «Con estas acusaciones se dañaba tanto la imagen del trabajador como la institución», dijo.
