entrevista
"Estamos formados e informados para la segunda ola"
Cristina Sarasa Bellosta es directora de Enfermería del sector sanitario III de Zaragoza. Nacida en Huesca, iba para periodista pero se enamoró de la profesión de enfermera. Y ahí sigue.
No baja la marea del coronavirus. Cristina Sarasa audita la realidad desde la dirección de Enfermería de Atención Primaria del Sector III de Zaragoza.
Los nuevos datos de la pandemia dan un pelín de miedo…
Hay que afrontar la situación con serenidad. El miedo nunca es bueno para resolver ningún problema.
¿Qué perspectiva divisa desde el Sector III?
Zaragoza está dividida en tres sectores sanitarios. El que nos ocupa comprende el Hospital Clínico, además de siete centros de salud urbanos y 15 rurales. Los urbanos: Delicias Sur, Delicias Norte, Valdefierro, Miralbueno, Oliver, Univérsitas y Bombarda. Los rurales: Ejea, Sádaba, Tauste, Gallur, Sos del Rey Católico, Herrera de los Navarros, Cariñena, Épila, La Almunia, María de Huerva, Utebo, Casetas, Borja, Tarazona y Alagón. La perspectiva es amplia. El Sector III atiende a 300.000 zaragozanos.
Uno de cada cuatro aragoneses...
Sí, aproximadamente.
Incluidas zonas subrayadas en el mapa de la covid como el barrio de Delicias, en Zaragoza, o Ejea.
Así es.
¿Cómo afrontan la situación en estas zonas determinadas?
Como en el resto, intentando dar respuesta a unas necesidades. Desde el Salud, más que esperar a que vengan los problemas, se planifica para afrontarlos antes de que surjan. También en Delicias o Ejea de los Caballeros.
¿Qué siente cuando lee que ya se han infectado más de 700.000 personas en España?
Que tenemos que seguir luchando. Afortunadamente, estamos formados e informados para la segunda ola.
¿Y los cierres de las aulas en los colegios?
El regreso a las clases era una variable con la que ya se contaba.
¿Imaginaba algo semejante a la pandemia covidiana hace poco más de seis meses?
Nadie lo imaginaba. Nunca vimos algo semejante. Es algo nuevo, no conocido. Y, dentro de nuestras posibilidades, la hemos combatido y la seguimos combatiendo.
¿Cuándo tuvo la primera noticia del coronavirus maldito?
Me enteré relativamente pronto. Mi hija Carmen estaba estudiando el curso pasado cuarto de Medicina en Italia, en Módena, concretamente. Allí llegó antes.
¿Qué le dicen en casa?
Tengo otra hija, María, que estudia Derecho y Periodismo en Madrid. Lógicamente, está preocupada. Igual que mi marido, Jaime, que es arquitecto. Vivimos la situación con preocupación, pero no con miedo.
¿Por qué se hizo enfermera?
Yo iba para periodista…
¿Para periodista…?
Sí, para periodista; pero me enamoré de la profesión de enfermera. También soy licenciada en Derecho, algo que viene muy bien para adquirir conocimientos jurídicos y de gestión.
¿Qué le dice al sector sanitario? Y no me refiero exclusivamente al Sector Sanitario III de Zaragoza…
Todos estamos orgullosos de la labor que se está realizando. Y no solo de Enfermería, sino de todos profesionales de la sanidad.
