Una inversión de 300 millones para garantizar la revolución verde
Red Eléctrica de España ha creado dos ‘autopistas’ y cinco líneas en Aragón en 12 años que permiten el impulso de las renovables.
El decidido impulso que vive el sector de las energías renovables en Aragón no solo se debe al hecho de disponer de territorio, de los recursos necesarios (viento y sol) y la visión de la DGA de priorizar los proyectos antes que ninguna otra comunidad autónoma. También hacía falta contar con la infraestructura eléctrica necesaria para evacuar y transportar toda la producción de los parques eólicos y plantas fotovoltaicos en desarrollo, y de eso se encargó con anticipación Red Eléctrica de España gracias a una inversión de 300 millones de euros.
El salto ha sido cualitativo en los últimos doce años, el periodo que ha llevado el desarrollo de dos ‘autopistas’ que conectan Teruel con Castellón (los ejes Mezquita-Morella y Mudéjar-Morella) y de otras cinco líneas repartidas entre las provincias de Zaragoza y Teruel. Solo las dos primeras infraestructuras supusieron el tendido de 115 kilómetros, imprescindibles para mejorar la seguridad y calidad del suministro, incrementar la capacidad de evacuación y, sobre todo, el mallado de la red de transporte. Esto supuso la mayor inyección, de 127 millones.
Este desembolso económico ha permitido que la red haya pasado de 2.706 a 3.323 kilómetros y que el número de transformadores se dispare de 3.474 a 5.456, determinantes para la incorporación de las energías renovables al sistema eléctrico español.
Uno de los hitos ya se vivió el año pasado al convertirse Aragón en la autonomía que más potencia renovable sumó al sistema, con un crecimiento del 49,1% al conectarse a la red hasta 1.787 megavatios. De hecho, aportó más de una cuarta parte de toda la energía limpia instalada en España, que ascendió a 6.539 megavatios.
Récord histórico
Esto permitió que la generación verde en Aragón supusiera el 54% del total en 2019 y se registrara un récord histórico de aportación de los parques eólicos y fotovoltaicos en servicio.
Sobre esta base, Aragón aspira con los proyectos en curso a convertirse en una potencia eólica como tercera autonomía (9.300 megavatios), solo por detrás de Castilla y León y Cataluña, y en la sexta en el cómputo global si se le suman los proyectos fotovoltaicos (19.600 megavatios). En todo caso, el balance final está muy condicionado por la regulación estatal, como es el caso de la moratoria lanzada el pasado verano del Ministerio de Transición Ecológica para poner orden en el sector.
El delegado de Red Eléctrica en Aragón, José Ignacio Lallana, resaltó que las inversiones que han acometido en los últimos años en la Comunidad ponen de manifiesto "el compromiso de la compañía con la transición energética, el desarrollo de las energías renovables y la descarbonización de la economía".
Lallana también destacó que han corroborado la importancia de tener una red de transporte "mallada y robusta" que, además de mejorar la calidad y seguridad de servicios esenciales como el suministro eléctrico y la conectividad, ayude a integrar la expansión de las energías renovables. "De esta manera, contribuye a cumplir los objetivos establecidos en la materia", añadió.
