La Guardia Civil de Morata de Jalón ha llevado a cabo una investigación que ha permitido la localización de una plantación de marihuana, ubicada en un paraje del término municipal de Arándiga y de muy difícil acceso. También se ha detenido a una persona por presuntos delitos contra la salud pública por cultivo de droga, quebrantamiento de condena y tenencia ilícita de armas. 

La investigación se inició a comienzos del mes de septiembre por la posible existencia de una plantación de marihuana oculta por una zona boscosa y de difícil acceso en el término municipal de Arándiga. Tras varios días de inspección, los agentes lograron localizar el jueves pasado en el paraje 'Las Cañadas', un pasadizo realizado entre cañas y maleza a modo de túnel, que accedía a un terreno de unos 250 metros cuadrados donde había multitud de plantas de marihuana en avanzado estado de crecimiento. 

Durante la inspección, la Guardia Civil localizó a un varón, sentado sobre una caja, que al ser sorprendido por los agentes manifestó encontrarse en el lugar para el cuidado de la plantación durante las 24 horas del día. De hecho se hallaron dos tiendas de campaña tipo iglú, en cuyo interior había enseres personales, mantas, cama plegable, ropa, alimentos, etc. Es decir, lo necesario para pernoctar en el lugar durante varios días. 

Entre los efectos que portaba este varón en el momento de su identificación le fue intervenida una pistola detonadora municionada con 11 cartuchos. Además se intervinieron herramientas, productos para el cultivo de esta sustancia, un bate de béisbol, cuchillos, un machete, un motor de gasoil portátil para extraer el agua del río y regar la plantación y dos sensores de movimiento situados en las entradas de los túneles por los que se accedía a la plantación para alertar mediante señales sonoras de la presencia de personas en el lugar. 

Guardia Civil

Este varón de 27 años, nacionalidad colombiana fue detenido por un presunto delito contra la salud pública por cultivo o elaboración de droga, tenencia ilícita de armas y quebrantamiento de condena al constarle un señalamiento judicial en vigor de privación del derecho a tenencia y porte de armas. 

Por todo lo anterior la Guardia Civil procedió a la incautación de las 63 plantas de marihuana, con un peso de 200 kilos. La retirada fue laboriosa debido a las características del terreno montañoso y abrupto, hasta su traslado a un vehículo situado a unos 700 metros de distancia del lugar de la plantación. La investigación continúa abierta ya que no se descarta la implicación de más personas en este hecho delictivo.

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