Los centros infantiles privados pierden un 25% de niños para este inicio de curso
Los padres se retraen por el temor a los contagios y la DGA mantiene hasta 20 menores de 2 y 3 años en cada grupo. Al menos cinco de estos centros han bajado la persiana por la pandemia.
La matriculación en los centros infantiles privados homologados por el Gobierno aragonés ha caído al menos un 25% de cara a este próximo curso principalmente por el temor de las familias a posibles contagios. También influye el hecho de que muchos progenitores durante medio año han buscado ya una forma alternativa de atender a sus hijos pequeños, bien con cuidadores o a cargo de los abuelos, y ahora prefieren continuar con la misma forma. Además, también hay hogares en los que alguno de sus miembros ha perdido el trabajo como consecuencia de la pandemia y pueden prescindir de la guardería.
La Patronal Aragonesa de Centros de Educación Infantil (Pacei), con implantación en toda la Comunidad, cifra en un 25% este descenso. "Hace unas semanas podíamos estar hablando de un 30%, pero algunos padres que veían con preocupación la vuelta al aula en los colegios ha llevado a que a última hora hayan optado por nuestros centros", señala la vicepresidenta de la Pacei y responsable de la organización en Huesca, Patricia Betrián.
Desde la Asociación Aragonesa de Centros de Educación Infantil (Asacei), Alejandra Reguero, habla de una caída del 50%. "La pérdida de alumnos va también por barrios. En los más jóvenes de Zaragoza como Arcosur o Valdespartera podemos estar hablando de un 30%, mientras otros años tenían lista de espera. En otras zonas de la ciudad con menos población infantil la pérdida de alumnos es muchísimo mayor", cuenta.
En su caso, por ejemplo, el establecimiento que posee en Rosales funcionará en septiembre con la mitad de las plazas ocupadas mientras en el de La Azucarera esta ocupación baja al 37,5%. "Lo que tengo claro es que en la Azucarera voy a arrancar poniendo de mi bolsillo entre 1.000 y 1.500 euros para seguir abierta a la espera de que todo mejore", reconoce.
En Aragón hay unas 130 escuelas infantiles privadas autorizadas por el Gobierno de Aragón a las que solían acudir unos 7.000 niños de entre 0 y 3 años y en las que trabajan unas 1.300 personas.
Mientras, las escuelas infantiles de la DGA recibieron un 15% menos de solicitudes en comparación con el periodo de inscripción del año pasado, mientras que las pertenecientes al Ayuntamiento de Zaragoza han tenido un centenar más de interesados.
Desde Pacei y Asacei coinciden un lanzar un mensaje de "tranquilidad" a las familias y destacan la baja incidencia de contagios en los centros que han seguido funcionando durante el verano. "Están muy por debajo del 1%. Tenemos constancia de que se han podido producir positivos en tres aulas", señala Betrián desde la patronal. La pandemia sí se ha llevado por delante cinco de estas escuelas que no levantarán la persiana porque sus propietarios han adelantado su jubilación o no han podido afrontar las pérdidas.
Sorpresa ante las ratios
Desde las dos organizaciones mostraron su sorpresa ante las ratios que recoge el protocolo para las guarderías públicas de la DGA publicado este viernes y por el que también se rigen estos centros. Así, se recomienda que el grupo de convivencia estable con niños de 2 y 3 años no supere los 20 alumnos, igual que antes del coronavirus. El "desconcierto", aseguran, es mayor cuando para las aulas de entre 0-1 años se permiten hasta 14 niños (antes 13) y en la etapa de hasta un año hasta 10 (antes 8).
De todas formas, muchos de estos centros infantiles seguirán manteniendo los grupos burbuja de 10 niños por educador con los que venían trabajando y que ya habían organizado.
