Aragón alcanza 3.000 test PCR al día y recurre al sector privado para confirmarlos en 24 horas

Llegar al mayor volumen de contactos de aquellos pacientes que han dado positivo en covid se ha convertido en la apuesta para controlar la pandemia de la Consejería de Sanidad, que en las últimas semanas ha incrementado su capacidad de diagnóstico hasta alcanzar las 3.000 pruebas diarias. Para ello, ha llegado a acuerdos con, al menos, un laboratorio privado, ha incorporado una nueva máquina al hospital San Jorge de Huesca y ultima la puesta en marcha del Centro de Investigación Biomédica de Aragón (CIBA). Así se han conseguido multiplicar por seis las pruebas que se hacían en abril y, según el ministerio, actualmente es la tercera comunidad con mayor tasa de diagnóstico, por detrás de Navarra y País Vasco.

La comunidad aragonesa detecta entre 350 y 600 positivos de covid, y lo hace a través de unas 3.000 PCR al día. La media de toda la semana pasada –sin incluirse los datos sin depurar que la DGA notificó este domingo– se sitúa en 2.887 test por jornada, muy lejos de los 415 que se hacían durante la semana del 20 de abril, tras un mes de confinamiento. En aquel momento, los responsables de Salud Pública reconocieron que no tenían suficiente capacidad y, en plena pandemia, los laboratorios se fueron equipando.

Así, en la semana de la fase 0 –del 4 al 10 de mayo– se hacían 765 test de media. Una semana después, la primera de la fase 1, se alcanzaban los 933 y a partir de allí se superaron el millar. Durante el fin de semana estas cifras se reducían, situándose entre las 200 y 500 al día, pero entre semana eran más elevadas: entre 1.000 y 1.300. En una ocasión se rozaron las 3.000, según los datos de Sanidad.

Aragón tenía a mediados de mayo capacidad para hacer 2.000 pruebas al día y comenzó la contratación de rastreadores, con el objetivo de para dar con los contactos más cercanos y hacer pruebas en 24 horas. La situación se mantuvo estable y en la semana previa a la normalidad se hicieron 764 test diarios de media. En ese momento, la pandemia comenzó a expandirse por la Comunidad.

Ahora los brotes se han multiplicado –89 activos– y con ellos los contactos y las pruebas diagnósticas, provocando la saturación de los centros de Atención Primaria, que han tenido que ampliar su horario, y también de los laboratorios. Además, en la última semana se ha producido algún fallo técnico que ha ralentizado la obtención de resultados.

La consejera de Sanidad, Sira Repollés, confirmó que se había contactado con un laboratorio privado para que no hubieran test pendientes. El objetivo, confirmaron desde CC. OO., es que los resultados se obtengan en 24 horas o incluso menos. Para ello, detallaron fuentes de Sanidad, se ha puesto en marcha una nueva máquina en el hospital San Jorge de Huesca, que "permite duplicar los diagnósticos". Además, se trabaja para que el CIBA esté en funcionamiento en los próximos días.

Actualmente, la comunidad aragonesa es la tercera con mayor capacidad de diagnóstico por habitante, según los datos facilitados por el Ministerio, correspondientes a la semana del 17 al 23 de julio. Aragón hizo 1,08 pruebas PCR por cada 100 habitantes, solo superada por Navarra (1,31) y País Vasco (1,37). Lejos se encuentran autonomías como Madrid (0,48), Galicia (0,40) o Andalucía (0,27). Incluso Cataluña, con una situación similar, hace menos test: 0,89 por cada 100 residentes.

Los laboratorios, saturados

Este incremento de pruebas también se ha trasladado al sector privado. "Hemos pasado de tomar muestras dos veces a la semana a que sea casi de manera diaria", explica Isabel Navarro, directora técnica del centro de análisis genéticos Citogen. Desde hace un par de semanas ha percibido un cambio en las solicitudes: de pruebas serológicas a PCR. ·Hacíamos unas 150 PCR a la semana y ahora son alrededor de 120 al día·, reconoce, al tiempo que explica que sus clientes son empresas, pero también particulares, especialmente, aquellos que han estado con el contacto de un positivo. También los que van a viajar.

El precio de una prueba PCR oscila, dependiendo del laboratorio, entre 70 y 150 euros. Por su parte, los test serológicos tienen un menor coste, alrededor de los 50 y 70 euros.