Las reservas de vacaciones a corto plazo de los aragoneses caen hasta un 80% en tres días
Las últimas noticias de contagios también provocan un desplome de la llegada de turistas a los hoteles zaragozanos.
El miedo a los rebrotes y el llamamiento a un confinamiento voluntario en Zaragoza y la Comarca Central han provocado que muchos aragoneses hayan cancelado las reservas de esas vacaciones que estaban a punto de comenzar. Hasta un 80% de anulaciones de viajes en esta próxima semana se han registrado en las agencias en los tres últimos días, según el dato que maneja Jorge Moncada, presidente de la asociación que las agrupa.
A más largo plazo, de cara a la última semana de julio, agosto y septiembre, lo que hay, de momento, son "muchas preguntas e inseguridades". "La gente no cancela hasta última hora porque tiene ganas de salir y la situación va variando", explicó. Este viernes vivió "un desastre", con continuas anulaciones de billetes de tren a Andalucía, Madrid y Barcelona y viajes de empresa a Lisboa, Málaga, Valencia y Londres.
Por ahora, los vuelos para agosto desde el aeropuerto zaragozano a las islas "tienen una buena ocupación". Están en el aire los viajes de novios contratados antes del estado de alarma para septiembre a sitios como India, Nepal o Maldivas. "Desde después de la pandemia hemos vendido cero al extranjero, más allá del sur de Francia como Biarritz y Bayona y algo de Portugal", explicó Moncada. "La temporada de verano haremos lo que se pueda pero no la vamos a salvar. Hay que pensar ya en el puente de La Constitución y Navidades", concluyó.
La Federación de Empresarios de Hostelería de Zaragoza- Horeca, a la espera de conocer los datos del sector para hacer una valoración, se muestra "altamente preocupada ante esta situación y ante la incertidumbre del futuro más próximo". Desde este pasado jueves se ha producido una cascada de anulaciones en reservas de hoteles y restaurantes.
Lo saben bien en la oficina municipal de turismo de la Plaza del Pilar de la capital aragonesa. Si el jueves pasaron por ella un centenar de personas, ayer la afluencia "frenó en seco" y se redujeron a la mitad. "La sensación es como si hubiéramos vuelto al 25 de mayo, cuando se abrió por primera vez después de la pandemia", describieron. Visitantes los hay, como una pareja de Gales y grupos de franceses además de los nacionales.
Campaña "por la alcantarilla"
El vicepresidente del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, fue este viernes muy gráfico al reconocer la repercusión negativa de los nuevos brotes en el turismo rural. "La primera parte de la campaña para atraer turistas se nos ha dio a la alcantarilla", dijo.
"No obligamos a cerrar a nadie, solo les pedimos que garanticen las medidas de seguridad", destacó al hablar de la hostelería, la más afectada por el anuncio del Gobierno autonómico de pedir a los zaragozanos que eviten salir de casa . El sector turístico, admitió, ha visto cómo sus reservas han caído del 70% al 12%.
