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Javier Villanova «Nos jugamos gran parte del año en función de cómo sea la campaña turística»
El consejero delegado de Araven, dedicada al equipamiento comercial y de hostelería, prevé un 20% menos de ventas este año aunque ese porcentaje podría ser inferior si se recupera el turismo
¿Va a poder mantener Araven la previsión en ventas que tenía?
La pandemia ha tenido un impacto dispar entre las dos líneas de negocio de la empresa. En el caso de la de equipamiento para la hostelería, la caída de ventas fue radical desde la segunda quincena de marzo, en el que el sector cerró todos sus establecimientos. Afortunadamente, la otra línea, la de gama de cestas y carros de compra para el retail, ha mantenido el ritmo de crecimiento de los últimos años. Las perspectivas de cierre de 2019 nos sitúan en un retroceso cercano al 20% sobre 2019. Esperamos que sea menor en función del ritmo de recuperación que se produzca en la restauración y la hostelería.
¿Han tenido que parar de trabajar muchos días?
En ningún momento la actividad en la empresa se ha paralizado. Durante las primeras semanas del confinamiento y debido a la indefinición y cambio de normas tuvimos ciertos momentos de intermitencia en la producción y logística de los pedidos, pero conforme se fueron resolviendo las dudas, la cadena de suministro se estabilizó sin problemas, primero en España y posteriormente en la relación con nuestros clientes de exportación.
¿Han podido ya dar salida al stock almacenado?
Los niveles de stock no se han visto penalizados. Nuestras ventas en equipamiento hostelero se realizan a través de distribuidores en todo el mundo y lo que observamos es una mayor frecuencia de pedidos pero de menor importe. Con la reapertura estos últimos meses hemos asistido a una avalancha de pedidos en un corto periodo de tiempo. Gracias a haber mantenido esos niveles de stock previos a la crisis estamos siendo capaces de servir inmediatamente esta concentración de pedidos.
¿Se nota cierta recuperación en el sector de la restauración?
Lo que si podemos decir es que mayo ha sido un mes sensiblemente mejor de lo esperado tras un mes de abril nulo. En general, la restauración independiente, y especialmente con servicio en terrazas, ha reaccionado de manera inmediata. La organizada y en centros comerciales también, aunque sea con aforos limitados. Es evidente que queremos salir y volver a la normalidad en nuestra vida social. Nos jugamos gran parte del año en función de cómo sea la campaña turística de verano. Aunque sea imposible que el sector repita las cifras del año pasado especialmente por el gran déficit de llegada de turistas extranjeros, esperamos que al menos no haya una caída superior al 30%.
¿Qué perspectivas tiene Araven para la segunda mitad de año?
Somos moderadamente optimistas. Estimamos que el negocio de cestas y carros mantendrá una evolución positiva y crecerá con respecto al año pasado. Antes de la pandemia teníamos cerrados acuerdos con importantes ‘retailers’ que nos han confirmado que siguen en firme. Incluso estamos ya implementado alguno de ellos como es el caso de Dia en España o Walmart en Argentina. Como hemos comentado la mayor incertidumbre está en la evolución de la restauración y la hostelería.
¿Cómo está funcionando la exportación?
Mientras que en Europa el inicio de la recuperación es un hecho en América y, en especial, en Latinoamérica están viviendo sus peores momentos. Destacar la preocupación por la situación en México donde nuestra presencia es muy importante. El impacto de la pandemia está siendo especialmente duro con las perspectivas de llegada de turistas y el sector del retail. A diferencia de países europeos está sufriendo importantes recortes en su previsiones de inversión en equipamiento.
