TARAZONA Y EL MONCAYO
El arte mural vuelve a Torrellas con tres nuevas fachadas pintadas por artistas urbanos
La localidad apuesta por seguir ampliando su oferta cultural al aire libre para atraer al turismo.
Torrellas sigue apostando por el arte al aire libre y esta semana tres artistas han estado pintando sus obras en tres fachadas de este pequeño pueblo de la comarca de Tarazona y el Moncayo.
Se celebra la segunda edición del GUAU, un encuentro de arte urbano, aunque en realidad hace cinco años que los dibujos empezaron a aparecer en fachadas que se convirtieron en lienzos. Los tres primeros años fue mediante el ‘Concurso de arte urbano Villa de Torrellas”, pero después el Ayuntamiento, asesorado por los propios artistas, apostó por abandonar el formato de concurso adoptando la fórmula de encuentro de arte urbano.
Tras estos cinco años de murales, a los que hay que sumar el proyecto de las puertas pintadas con retratos multiculturales y de personajes ilustres de la historia del artista Xolaka, Torrellas se ha convertido en un auténtico museo al aire libre. "A mí me gusta mucho esta expresión porque realmente es lo que es. Tenemos un total de quince fachadas y veinte puertas pintadas, y la gente puede disfrutar del arte por todas nuestras calles", señala el concejal de Cultura de la localidad, Vicente Ortega.
Para la edición de este 2020 del GUAU, los artistas invitados que están realizando sus intervenciones son Lily Brick, Alberto Montes y Mohamed L’Ghackam, nombres propuestos por sus propios compañeros del año pasado. Los tres se muestran satisfechos de su paso por Torrellas, donde han podido realizar unos días de convivencia intercambiando experiencias.
Donadas por los propios vecinos
Las fachadas que hacen de lienzo son donadas por los propios vecinos y son "de un tamaño medio para lo que estos artistas suelen pintar". El Ayuntamiento facilita la maquinaria para "llegar a los espacios más altos", el alojamiento y la manutención, y les paga una tasa que está fijada en la convocatoria con la que pueden adquirir el material que necesitan.
"Estamos encantados, es una iniciativa que cada vez tiene más reconocimiento, está transformando el pueblo, tenemos cada vez más visitantes y, sobre todo, absorbemos un montón de cosas de la gente que viene a participar en el proyecto", valora Ortega.
La repercusión mediática de fachadas y puertas pintadas provocó un aumento significativo del turismo en el municipio, y el Ayuntamiento se vio obligado a editar una guía con un plano del pueblo en el que aparecen señalizadas las obras de arte. Este año habrá que volver a actualizar esta información con las tres nuevas fachadas.
