crisis del coronavirus
Sanidad plantea tres escenarios para organizar el sistema a la nueva realidad
La consejería elabora unas recomendaciones para la asistencia hospitalaria y especializada en la fase de transición de la epidemia.
La Dirección General de Asistencia Sanitaria ha elaborado unas recomendaciones para la organización del sistema hospitalario y especializado en la fase de transición de la epidemia por covid-19 y plantea tres escenarios respecto a la incidencia de contagios y ocupación de camas uci para adecuar sus planes de contingencia a la evolución de la situación epidemiológica.
La desescalada sanitaria se basa en los criterios que demuestran que la propagación disminuye y que existe una capacidad suficiente de los sistemas de salud y una vigilancia adecuada para el seguimiento de casos y contactos. Teniendo en cuenta estos condicionantes, Aragón se encontraría ahora a caballo entre la fase de transición –con una incidencia acumulada bisemanal de 13 casos por cada 100.000 habitantes– y de baja transmisión –la ocupación de camas hospitalarias y de uci es menor del 3%–. Una tendencia que se observa desde principios de mayo. Se trabaja en un escenario de desescalada para adaptar la capacidad asistencial a un panorama «que empieza a mejorar», según recoge el documento del Gobierno de Aragón con indicaciones de las sociedades científicas, pero previendo rebrotes.
Entre las medidas generales de prevención en las fases de transición y de baja transmisión, se mantienen protocolos establecidos al inicio de la pandemia, como aislamiento de pacientes sospechosos. Incluye prever una atención en turnos de mañana y tarde, potenciar sistemas de alta precoz de pacientes, fijar criterios de priorización clínica para intervenciones o minimizar los traslados entre centros hospitalarios. Se deben procurar circuitos diferenciados de atención a pacientes covid y no covid tanto en urgencias como en consultas o salas de diagnóstico, tratamiento y quirófanos. Las recomendaciones van dirigidas a profesionales, pacientes y cuidadores. En este último caso, por ejemplo, se limita a una visita por paciente y se prohíbe el uso de salas de televisión.
Respecto a las intervenciones programadas, se evaluará telemáticamente la presencia de síntomas compatibles con covid en los 14 días previos a la realización del procedimiento y se repetirá en el momento del ingreso o en las 72 horas previas, y se deja a criterio de cada centro establecer los sistemas para estas evaluaciones. Además, Javier Longás, jefe del servicio de Anestesia del Hospital Clínico, explicó que en fase de transición se pide PCR a todos los pacientes que ingresan para cirugía programada con hospitalización y en un escenario de transmisión baja se hará el test a enfermos diagnosticados previamente de coronavirus o para procedimientos de riesgo alto. Muchas medidas de protección "ya se realizaban antes en quirófano", dijo, pero se han reforzado y "se deberían mantener".
Atender las listas de espera
Miguel Ángel Dobón, jefe de servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo del Hospital Universitario Miguel Servet, indicó que esta semana han empezado a hacer cirugía de tarde para reducir las listas de espera y se está empezando a normalizar la actividad.
Desde el servicio de Cirugía General del Servet, apuntó, para junio hay unos 22 quirófanos de tarde y la idea es programar también el próximo mes. Tal y como indicó, durante los momentos de mayor presión asistencial por covid se mantuvo la actividad quirúrgica, aunque reservada sobre todo a operaciones indemorables.